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Gijón-Madrid, contra la reforma de la ley del aborto
SOCIEDAD

Gijón-Madrid, contra la reforma de la ley del aborto

Las mujeres asturianas lideran una protesta que lleva el descontento contra la reforma de Gallardón ante la convención del PP y hoy al Congreso

NOELIA A. ERAUSQUIN

Sábado, 1 de febrero 2014, 14:31

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La manifestación contra la reforma del aborto planeada por el PP ha arrancado hoy junto a la estación de Atocha de Madrid al grito de "Gallardón dimisión", en alusión al ministro de Justicia, y con pancartas con lemas como "Decidir nos hace libres".

La marcha, que discurrirá hasta la plaza de Neptuno, ha comenzado tras la llegada del "tren de la liberad" a la céntrica estación madrileña, en el que viajaban centenares de mujeres desde Asturias y de varias provincias de España que han sido recibidas, entre otras, por la vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano. "Decidir nos hace libres", "Aborto legal" y "Nosotras decidimos" son algunas de las pancartas que portan las manifestantes, en las que además de representantes políticos hay figuras del cine como las actrices Pilar Bardem, Loles León o María Adánez.

Esta iniciativa, que se gestó en la Tertulia Feminista les Comadres y de Mujeres por la Igualdad de Barredos (Asturias), ha sido organizada en Madrid por la Plataforma "Decidir Nos hace libres", formada por más de 300 organizaciones de distintos ámbitos, y cuenta con el apoyo de asociaciones de varios países.

La marea asturiana

Era alrededor de la una de la tarde cuando una marea morada invadió la estación de tren de Gijón. Con una reivindicación seria, la de conseguir paralizar la reforma de la ley del aborto, pero con un ambiente de lo más festivo, un centenar de mujeres, a las que se les sumaron más en Oviedo, emprendieron viaje a Madrid en el llamado Tren de la libertad, una iniciativa que comenzó a gestarse gracias a la tertulia feminista Les Comadres de Gijón y a la Asociación Mujeres por la Libertad de Barredos y que ha ido creciendo, de tal modo que mañana está prevista en la capital de España la primera gran protesta ciudadana en contra de los cambios que impulsa el ministro Alberto Ruiz Gallardón. Entre ellas se encontraban concejalas socialistas de Gijón como Begoña Fernández o Carmen Veiga; la exalcaldesa de la ciudad, Paz Fernández Felgueroso; la exconsejera María José Ramos o las diputadas Adriana Lastra, del PSOE, y Emilia Vázquez, de IU.

Cantando su propia versión de El Chacachá del tren, convertida en una especie de himno oficioso; ataviadas con petos morados en los que se podía leer El tren de la libertad y tras una pancarta con el lema porque yo decido, las integrantes de esta especial caravana entraron en el convoy que deparaba coincidencias curiosas, como la presencia de numerosos miembros del PP, que se desplazaban a Valladolid a la convención del partido. Con toda la convicción que ofrecen los ánimos exaltados, las participantes llegaron a ofrecer sus petos a los concejales populares Maite Menéndez, Raquel Vega, Gabriel López y Francisco Cubiella, aunque ninguno aceptó el envite, mientras que otros viajeros mostraban su apoyo a la iniciativa con gritos de "a por ellos".

Si la marea blanca ha logrado la paralización de la privatización de los hospitales madrileños, las asociaciones feministas convocantes esperan que su marea consiga detener una reforma a la que califican del "mayor ataque de la democracia a la libertad y los derechos de la mujer, ya que los hace retroceder casi treinta años".

El tren se quedó pequeño ante la demanda generada. Las plazas se agotaron en poco tiempo e incluso se creó una lista de espera. Por ello, se han fletado 16 autobuses desde varios puntos de Asturias para viajar a Madrid, que saldrán de madrugada para llegar a tiempo a la protesta, y otras mujeres se desplazarán en coche.

Presencia en Valladolid

El convoy realizó una parada en León, donde asociaciones feministas de la ciudad intentaron saludar a sus integrantes en el andén, pero la Policía les impidió el paso a esa zona de la estación, con ciertos momentos de tensión. También se detuvo en Palencia. Allí sí que las participantes del 'Tren de la libertad' pudieron abrazarse con compañeras de esta localidad, antes de emprender la marcha a Valladolid, donde hacen noche. Ya en la capital castellana, unas 1.500 personas estaban esperándolas para recibirlas y emprender una marcha hasta el auditorio en el que el PP organiza su convención. Al grito de "Nosotras parimos, nosotras decidimos" y "Sí se puede" las asturianas descendieron del Alvia entre aplausos de los presentes que abarrotaron el anden de la estación Campo Grande. Había numerosas pancartas con 'Mi cuerpo es mío. Por tanto, yo decido' y 'Abortar es un derecho. No es un delito'. "El recibimiento fue espectacular", explicaba Ana Isabel García del Fórum de Política Feminista, algo en lo que coincidía Blanca Cañedo, vocal de la Asociación de Clínicas Acreditadas para la Interrupción del embarazo (Acai) y fundadora del centro Belladona, que también relató que el viaje fue muy entrentenido.

Los movimientos feministas de Asturias, acompañados de los ciudadanos de Valladolid, con una mayoritaria presencia de mujeres, se desplazaron hasta los alrededores del Auditorio Miguel Delibes, para participar en la concentración que estaba organizada para defender el "aborto libre y gratuito" y en la que coincidieron con otros colectivos como el 15-M, Stop Desahucios, afectados por las preferentes o movimientos por la Sanidad y la Educación Púlica. Además, un reducido grupo de jóvenes provida se manifestó en contra del aborto, aunque a cierta distancia del resto. Tras el vallado que protegía el auditorio y ante un fuerte despliegue policial, las protestas transcurrieron sin incidentes, salvo breves momentos de tensión al empujar algunas personas las vallas.

La jornada fue muy seguida en las redes sociales. El propio Alfredo Pérez Rubalcaba y la portavoz del PSOE en el Congreso, Soraya Rodríguez, fueron de los muchos que mostraron su apoyo a las viajeras. Además, la portavoz socialista se encargó personalmente de recibir al grupo en la estación vallisoletana.

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