Un ojo de zafiro, el descubrimiento más "sorprendente" de la Cámara Santa

El presidente del Principado, Javier Fernández, ha destacado hoy la última restauración llevada a cabo en la Cámara Santa de la catedral de Oviedo, un lugar que ha calificado de simbólico para los asturianos y de gran "interés histórico, artístico y emotivo".

Fernández ha visitado hoy junto al alcalde de Oviedo, Agustín Iglesias Caunedo, el arzobispo, Jesús Sanz y los consejeros de Presidencia, Guillermo Martínez, y Cultura, Ana González, los trabajos de restauración y limpieza que se han llevado a cabo en la Cámara Santa.

El jefe del Ejecutivo asturiano, que ha llegado a pie hasta la catedral desde la sede del Gobierno, ha estado acompañado durante la visita por uno de los arquitectos encargados de los trabajos, Jorge Hevia, que ha explicado a Fernández la intervención realizada.

La Cámara Santa reabrió sus puertas el pasado lunes, 11 de abril, tras cinco meses de limpieza y restauración que han supuesto una inversión superior a los 183.000 euros.

Estos trabajos han dejado a la vista detalles de la Cámara desconocidos hasta ahora, como un ojo de zafiro de la figura del apóstol Santo Tomás, que ha sido para Sanz Montes el descubrimiento más "sorprendente" del recinto prerrománico que acoge el Santo Sudario y las reliquias más emblemáticas de Asturias.

Los arquitectos Jorge Hevia y Cosme Cuenca, encargados de la restauración, también han procedido a la reordenación de las reliquias que se exhiben en el camarín y han aplicado una nueva iluminación a través de "leds" que dan un mayor protagonismo a la bóveda.

En cuanto a la redistribución de las reliquias que se encuentran en el camarín, existe ahora una jerarquía, en la que los tesoros se colocan en torno al Santo Sudario, como elemento que "preside" la renovada Cámara Santa.