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Choque de 'manolos'. A la saturación en las plantas por la gripe se unen otras complicaciones. En la imagen, dos de los robots empleados para el reparto (bautizados popularmente como 'manolos') chocan durante su recorrido por los subsuelos del HUCA, lo que retrasó la llegada de menús y fármacos a algunas de las habitaciones.
El HUCA prevé aplazar operaciones no urgentes si la presión por la gripe va a más

El HUCA prevé aplazar operaciones no urgentes si la presión por la gripe va a más

En los dos últimos días, 12 pacientes fueron enviados al Monte Naranco ante la falta de camas en el Central. La dirección insiste en hablar de «normalidad»

Laura Fonseca

Sábado, 17 de enero 2015, 00:15

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La epidemia de gripe amenaza con afectar al funcionamiento de los quirófanos en Asturias. El HUCA, el mayor centro hospitalario de la región, no descarta tener que aplazar operaciones si la saturación por la gripe va a más. Así lo aseguró el director médico del complejo sanitario, quien remarcó, no obstante, que hasta la fecha «hemos conseguido mantener la actividad habitual, y sin colapsos de las urgencias». Miguel Rodríguez, que ayer participó en un taller sobre técnicas de reanimación que el personal de Urgencias, del 112 y de Transinsa impartió en el HUCA a 150 escolares de Oviedo, insistió en que lo que está ocurriendo en los hospitales, «es una situación que se repite y que no es exclusiva de Asturias. Todos los años, durante la epidemia de gripe, tenemos el hospital con mucha más gente y con menos disposición de camas». A pesar de las derivaciones al Monte Naranco tras quedarse La Cadellada prácticamente sin camas libres, Rodríguez dijo sentirse «orgulloso de que el HUCA haya podido gestionar esta epidemia manteniendo la actividad».

No se han tenido que suspender operaciones ni consultas pero, si la situación se agrava, el hospital sopesa reprogramar sus quirófanos, avanzó el director médico. «Evidentemente si el pico de la gripe fuese tan grande que no fuésemos capaz de asumirlo con las camas libres, tendríamos que recurrir a posponer actividad programada», admitió este directivo. Eso sí, «ninguna intervención urgente se va a dejar de hacer», aclaró.

Desde hace semana y media, los hospitales están teniendo serias complicaciones en sus plantas debido al elevado número de ingresos. En Cabueñes aún se mantienen las habitaciones triples. Ayer todavía había cinco. La situación de sobreaforo ha obligado al hospital gijonés a derivar enfermos a Jove y Cruz Roja. Lo cierto es que las dolencias respiratorias, unidas a la gripe, han disparado la presión asistencial. Sobre todo entre pacientes mayores con enfermedades crónicas, y en los que un trastorno gripal o respiratorio puede provocar serias complicaciones de salud. De ahí el incremento de ingresos en ese tramo de edad. Responsables de Urgencias de los diferentes hospitales explicaron que en las últimas semanas el nivel de envíos a planta se ha elevado de forma notable, pasando del 20 y 30% a casi el 40%.

Lo llamativo es que la saturación hospitalaria se produce cuando aún no estamos en la fase de mayor incidencia gripal. Asturias es la comunidad donde la epidemia tiene mayor difusión viral pero su tasa de incidencia no es demasiado alta, ya que alcanza los 270 casos por cien mil (unos 3.000 a la semana). El año pasado, a esta altura del mes la tasa era tres veces mayor, 600 por cien mil. La Consejería de Sanidad prevé que lo peor de la gripe se produzca en tres o cuatro semanas, por lo que la epidemia seguirá con nosotros al menos hasta febrero.

95% de ocupación

En los dos últimos días, y tras superar el 95% de ocupación, el HUCA derivó doce pacientes al Hospital Monte Naranco, donde se ha abierto una unidad adicional de 20 camas para enfermos de Geriatría y Medicina Interna. El director médico de La Cadellada insistió en que estas derivaciones «se enmarcan dentro de la más absoluta normalidad. Es algo que hacemos todos los años», dijo. Sin embargo, la visión de los sindicatos es bien diferente y vinculan el lleno del HUCA con la reducción de plazas en el nuevo hospital. En La Cadellada hay 150 camas menos que en el viejo hospital. «Eso es lo que ahora nos está pasando factura, sobre todo, a los pacientes que son los que sufren las molestias», indicaron.

Sobre el aumento de personal que demandan los trabajadores, el director médico del HUCA dijo que se intenta «respetar la ratio de enfermera por cama». Según Rodríguez, «puede ser que en alguna unidad haya habido más ingresos y no hayamos podido reforzar la plantilla, pero lógicamente siempre que podemos lo hacemos». Médicos, enfermeros, auxiliares y celadores no comparten esta valoración y afirman que «no se han hecho contrataciones». La saturación del HUCA se vio agravada por un problema en el sistema 'Millennium' que anteayer se colgó y también por el fallo de los robots, que chocaron en su recorrido cuando transportaban fármacos y los menús de los enfermos.

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