El Sespa dice que el HUCA no cierra la cirugía sin ingreso sino que la ajusta al verano
Afirma el departamento que dirige Francisco del Busto en una nota de prensa que «la demanda asistencial se reduce» en los meses estivales por varias razones
L. FONSECA
Sábado, 9 de julio 2016, 01:52
La Consejería de Sanidad negó ayer que el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) vaya a proceder a 'cerrar' la unidad de cirugía sin ingreso, la conocida como de cirugía mayor ambulatoria. Afirma que lo que hará es «ajustar su actividad» a las necesidades del verano. Afirma el departamento que dirige Francisco del Busto en una nota de prensa que «la demanda asistencial se reduce» en los meses estivales por varias razones. Por una parte, «por la reducción de la carga de enfermedad estacional y también porque hay pacientes que prefieren no ser intervenidos durante los meses de verano». Asegura que el descenso de actividad «no es exclusivo del HUCA sino que ocurre en la inmensa mayoría de los hospitales del país».
Sanidad sale así al paso de las críticas vertidas por Usipa y Sicepa, que aseguraron que el HUCA 'cerraría' la unidad de cirugía ambulatoria, lo que conllevaría dejar de hacer unas 560 operaciones en mes y medio. «No se ajustan a la realidad esas cifras» ya que en verano se hacen menos intervenciones, razona la consejería, que asegura que el HUCA tiene programados para julio 26 quirófanos por la mañana y 7 de tarde. Para agosto, afirma que prevé realizar 40 sesiones de mañana y 14 de tarde. Desde el sector de los anestesistas aseguran que la programación en cirugía sin ingreso que Sanidad afirma que llevará a cabo «no es real. A buen seguro se suspenderá más de una, de dos y de tres intervenciones, ya que no hay personal para realizarlas». De los veinte posibles quirófanos ambulatorios de la próxima semana solo hay programados dos. Otros dos aparecen en el listado pero sin anestesista.
Precisamente, la falta de anestesistas fue motivo de valoración por parte de Foro Asturias. Su presidenta y portavoz en la Junta General, Cristina Coto, calificó de «situación límite» lo ocurrido en el HUCA. Para Coto, la suspensión de operaciones «es una gravísima línea roja, traspasada por una ineficaz gestión sanitaria por parte del gobierno».
«Añadir a unas listas de espera desbocadas la suspensión de intervenciones constata que la calidad de la sanidad pública no está garantizada con el gobierno de Javier Fernández», opinó Coto. «La situación es especialmente grave si tenemos en cuenta que en mayo los anestesistas acordaron no desarrollar actividades que desbordaran sus condiciones contractuales, por lo que hace tiempo que el gobierno conoce el problema».