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En la última jornada atracado en el puerto de La Coruña antes de su partida, el 'Creoula' recibió cientos de visitas.
El 'Creoula' navega ya rumbo a Bilbao

El 'Creoula' navega ya rumbo a Bilbao

Partió de La Coruña con destino a la capital vizcaína, a la que arribará el miércoles

LUIS ENRIQUE GONZÁLEZ

Lunes, 15 de agosto 2016, 01:50

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El buque-escuela 'Creoula' zarpó ayer de La Coruña para el primer curso de este año, que tendrá como escenario el mar Cantábrico. La tripulación del navío de la marina portuguesa se despedía de tierra firme acompañada por los veleros participantes en la Tall Ship Races, que ponía punto final a su recorrido en el puerto coruñés. Se trata de una regata que congrega algunos de los veleros de época más espectaculares del mundo y que ofrece la oportunidad de ver estas joyas históricas reunidas en un mismo embarcadero.

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Ya el sábado el muelle de transatlánticos fue un auténtico hervidero de gente durante la jornada. Coincidiendo con el día grande de las fiestas de La Coruña, multitud de vecinos y visitantes se acercaron a ver y pisar las 32 embarcaciones que permanecían amarradas y abiertas al público. Algunas, como el 'Creoula', lo estuvieron hasta altas horas de la noche para ofrecer un recuerdo único a los paseantes.

Pero para los 40 universitarios embarcados en el 'Creoula', la mañana iba a ser más dura que para el resto de coruñeses. A las siete de la mañana tocaba levantarse de su nueva cama para comenzar con la disciplina naval. Desayuno e instrucción de cara a la primera jornada de navegación en este antiguo bacaladero de 1937 donde siempre hay algo que hacer. El trabajo se divide en grupos o 'quartos', cada uno con su tarea y turno, distribuidos por cada mástil o 'palo' de este navío y a las órdenes de un cadete del ejército portugués.

El objetivo, según explica Fermín Rodríguez, director de la Universidad Itinerante del Mar de la Universidad de Oviedo, es formar personas, no sólo marineros, geólogos o biólogos. Las rutinas y el compromiso en el barco hacen que los 'instruendos' (grumetes) tomen conciencia de sus actos y responsabilidades con el grupo y perciban inmediatamente los beneficios del trabajo conjunto. «Es una formación complementaria que ayuda a la lógica de proyecto, a saber trabajar en equipo y liderar». El carácter multidisciplinar de las clases y conferencias a bordo, unido a las necesidades de navegación, convierte el viaje en una aventura que mezcla «el esfuerzo con lo lúdico», según sus palabras. «Una especie de cubo de Rubik con bastantes facetas».

Arrancaba así la jornada de navegación más larga, casi tres días de navegación para llegar a Bilbao el miércoles, donde la tripulación se tomará un respiro antes de continuar viaje hacia Santander primero y llegar a Avilés el domingo.

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