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«Por supuesto. No dudó el presidente del Principado. Javier Fernández dio un sí sin condiciones a participar en la campaña de EL COMERCIO contra la violencia sobre las mujeres. El Consejo de Gobierno, la gestora, los presupuestos...Todos quedaron, un instante, a la espera. Porque acabar con esta lacra es #cuestióndetod@s
Las agresiones machistas van a más

Las agresiones machistas van a más

Los malos tratos físicos o psicológicos generaron un 16% más de denuncias en el primer semestre, en el que se dobló el número de órdenes de protección

CHELO TUYA

Domingo, 20 de noviembre 2016, 03:03

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Ascensión quería divorciarse. Silvia, con una discapacidad psíquica del 70%, vivía con su pareja, pese a acumular órdenes de alejamiento. Karla logró que condenaran a su maltratador, pero acudió a visitarle para que él viese al bebé de ambos. Ascensión, Silvia y Karla no se conocían. De edades diferentes (46, 34 y 22), residentes en ciudades distintas (Avilés, Gijón y Oviedo), presentan un perfil absolutamente dispar. Sin embargo, sus nombres sonarán juntos esta semana. Y estarán unidos ya para siempre. Porque ellas son las tres asturianas que figuran en la relación de 39 mujeres víctimas de la violencia machista en España en este año.

Una agresividad sexista que crece. En el país y en la región. Cuando se acerca el Día Internacional de Lucha contra la Violencia sobre las Mujeres, el 25 de noviembre, las estadísticas sobre esta lacra social, que suma 866 asesinatos de género en la última década, se suceden. Y las que maneja el Instituto Asturiano de la Mujer, que aglutina las de todos los organismos oficiales, evidencian un problema lejos de solucionarse.

Siete denuncias al día

En diez meses y medio de 2016, son tres las asturianas víctimas de feminicidio, pese a que a Asturias solo se computan dos. La ovetense Karla Pérez fue estrangulada por su expareja y maltratador condenado en Melilla. Había viajado ella hasta la ciudad autónoma para que el joven viese al bebé de ambos.

Con ella son tres los casos de asturianas asesinadas, una cifra que iguala a la de 2015 y que rompen la tendencia a la baja tras el año negro de 2010, con cinco asesinatos.

Una curva en subida también en el resto del país. El asesinato de Juani Monge, el jueves, en León, es el número 39 para las estadísticas que maneja el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. Pero el caso de esta leonesa, divorciada de su maltratador y que murió a manos de él tras ir a convencerle de que se tratase del cáncer que padecía, es el número 44 para otros organismos. Las plataformas feministas consideran que algunos casos en investigación son, también, violencia de género. Solo 16 menos que las 60 muertas en 2015.

Y si las esquelas no van a menos, tampoco las comisarías tienen menos actividad. En los primeros seis meses del año 1.319 asturianas denunciaron sufrir algún tipo de violencia, física o psíquica, de su pareja o ex. Son un 16% más que en el mismo periodo del año pasado.

Significa que se presentaron siete denuncias cada día, frente a las seis diarias de 2015. Lo mismo ocurre en el resto del país. Si entre enero y junio del año pasado fueron 353 las españolas que pidieron auxilio a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, en el primer semestre de este año el volumen diario se elevó a 385.

Y lo mismo ocurre en los juzgados. En seis meses la petición de órdenes de protección se duplicó, hasta llegar a las 603, aunque solo el 59% de ellas fueron aprobadas. Eso significa que hay 356 mujeres con tutela judicial.

La misma cifra que de personas acogidas en la Red de Casas de Acogida. Un macro servicio que tiene a la gijonesa Casa Malva, el único centro integral de tratamiento a víctimas de todo el país, como referente. A sus diez pisos de emergencia, veinte de larga estancia y doce tutelados, distribuidos en dos edificios en Montevil, suma el Principado un total de 22 viviendas.

Por todas ellas pasaron en seis meses 356 personas, un 29% más que el año pasado. Un porcentaje que ya ha crecido, porque a día de hoy, según el último dato del Instituto Asturiano de la Mujer, son 452 las personas que han recibido amparo en estas viviendas. De ellas, 228 son mujeres que han sufrido algún tipo de agresión. Las 224 restantes son menores de edad o mayores a cargo de la víctima de malos tratos.

Riesgo extremo de muerte

Un acogimiento que, a veces, lleva implícita una protección policial permanente. El cuestionado VioGen, el sistema de atención integral a las víctimas que coordina el Ministerio del Interior, dice que hay una asturiana «en riesgo extremo» de ser asesinada. Ella sí recibe protección policial, pero no las otras 1.145 mujeres con un caso abierto en el Viogen. Para dos de ellas, el riesgo es «elevado», mientras que en la mayoría de los casos el VioGen «no aprecia» motivos para el temor.

Pero la víctima sí teme. Y para responder a sus preguntas el Principado, a través de su red de centros asesores, en quince municipios, y entidades como Abogadas para la Igualdad, Mujeres Separadas y Divorciadas o Cavasym, el único centro de atención a víctimas de agresión sexual, ofrecen asesoramiento legal y psicológico gratuito.

Unas entidades que urgen cambios. Desde la aplicación de la ley antiterrorista a los maltratadores hasta la obligatoriedad de que la víctima tenga asistencia legal antes de denunciar. Y mejoras en el VioGen. Y formar en violencia a los servicios médicos y jurídicos. Y aumentar la educación en igualdad. Para que no haya víctima número 40. Algo que es #cuestióndetod@s.

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