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La moda de las autolesiones juveniles

Crecen los casos de jóvenes que suben fotos a las redes sociales mostrando sus heridas

E. FERNÁNDEZ

Jueves, 16 de marzo 2017, 02:37

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Las autolesiones con intenciones no suicidas se han puesto de moda en los institutos. Asturias no escapa a esta realidad y en algunos centros de Educación Secundaria de la región ya está empezando a abordar esta cuestión entre la comunidad educativa ante el aumento del número de casos que se están dando, muy destacable a nivel nacional. Así lo constatan los responsables de varios IES asturianos ante la creciente preocupación mostrada por algunas familias.

Los centros educativos ponen en marcha charlas con psicólogos y orientadores para abordar el tema con los progenitores y saber cómo deben responder ante estas prácticas. Desde uno de los IES donde se ha detectado algún caso, explican que «abordamos el asunto con las familias para su tranquilidad aunque consideramos que es una moda pasajera». Y aunque este tipo de conducta no tiene porqué llevar a un desenlace trágico, exponen, es ya una realidad que no pasa desapercibida en las aulas de los concejos.

La Fundación de Ayuda a Niños o Adolescentes en Riesgo (ANAR) lleva varios años advirtiendo del aumento en el número de casos de jóvenes que se autolesionan a lo largo y ancho de todo el país. También llama la atención que en muchos casos es tendencia que los adolescentes «suban» fotos de sus heridas a alguna red social o grupo y se distribuyan así por la red. Ya no se ocultan.

Cortes superficiales

Cortes superficiales o quemaduras leves son las formas más frecuentes que emplean los adolescentes para 'marcarse'. En la mayoría de los casos, las emociones que sienten, según los expertos en Psicología, están detrás de las heridas que presentan los jóvenes. Parece que rasgar su piel se ha convertido ya en un instrumento para canalizar sus sentimientos. La soledad -a pesar de estar habitualmente comunicados a través de las redes sociales-, la angustia y la frustración se apuntan como las principales causas que llevan a los alumnos a provocarse lesiones desde edades bien tempranas, los primeros cursos de la Educación Secundaria Obligatoria (ESO).

La intolerancia a la frustración, el refugio en las nuevas tecnologías, el aislamiento social y el consumo temprano de determinadas sustancias también figuran en la lista de las posibles causas de esta realidad que ya se está tratando desde las aulas y también desde los hospitales, en los casos más severos. Otra cosa bien distinta son las 'tribus urbanas' que tienen las heridas como señas de identidad, ejemplo de ello son los llamados 'emos' o los 'góticos', una minoría en esta problemática y cuyo origen, y solución, es también diferente.

El ritmo de vida actual con padres que trabajan en ambos casos y esto lleva a los menores a estar demasiado tiempo solos sin la tutela de sus progenitores, también influye en estas prácticas con efecto de llamada de atención. Sin embargo, se recomienda a las familias estar atentos ante cualquier cambio agresivo en sus conductas, baja concentración o ante el aumento de comentarios negativos sobre sí mismos que experimenten los jóvenes. Ante estos primeros síntomas, los expertos recomiendan calma, cariño y comprensión al menor.

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