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José Arnáu, vicepresidente de la Fundación Amancio Ortega, estrecha la mano del presidente del Principado, Javier Fernández, tras firmar el protocolo de intenciones en la sede de Presidencia.

La Fundación Amancio Ortega dona a Asturias 6,7 millones «para ganar la partida al cáncer»

El dinero se destinará a un cuarto acelerador lineal para el HUCA y cuatro mamógrafos. Los primeros equipos estarán listos a finales de año

LAURA MAYORDOMO

Viernes, 28 de abril 2017, 04:26

Algo más de 6,7 millones. Es la cantidad que la Fundación Amancio Ortega Gaona -creada por el dueño de Inditex en 2001- donará al Principado de Asturias para «reforzar el arsenal tecnológico de la sanidad pública asturiana para combatir el cáncer». El dinero irá destinado a la adquisición de «un equipamiento de vanguardia», como lo definió ayer el consejero de Sanidad, Francisco del Busto, que comprende un acelerador lineal, una resonancia magnética y una máquina intrabeam para el servicio de Oncología Radioterápica del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), además de cuatro mamógrafos digitales de última generación para los hospitales de Cabueñes, San Agustín, Jarrio y Valle del Nalón. El proceso de licitación ya está en marcha, de modo que se espera que los primeros equipos puedan estar en funcionamiento «muy probablemente» a finales de este año o en el primer trimestre de 2018.

El presidente del Principado, Javier Fernández, y el vicepresidente ejecutivo de la fundación, José Arnáu, sellaron ayer a mediodía en la sede de la Presidencia el protocolo de intenciones por el que la región recibirá esa inyección de dinero. Una ayuda que, según Fernández, hará que Asturias -«que ya está en la primera línea en la lucha contra el cáncer»- se consolide «en la vanguardia europea» contra los tumores. Cada año se diagnostican en la región 6.000 nuevos casos de cáncer, de los que aproximadamente 3.500 precisan de tratamiento radioterápico. «Vamos a continuar en esa primera línea para ganarles la partida», confió el presidente asturiano.

El mayor desembolso será para el cuarto acelerador lineal del HUCA, que costará 3,8 millones. Su adquisición, prevista desde hace tiempo, había sido paralizada por el Sespa por falta de financiación. El año pasado se administraron 49.441 sesiones de radioterapia en Asturias (además de en el HUCA, esta atención se presta en el Hospital de Jove, en Gijón) con una espera máxima, a finales de año, de 24 días. Además, entre 2010 y 2016 unas quinientas personas fueron derivadas a otros centros hospitalarios, la mayoría para someterse a tratamientos de radiocirugía. Por eso Fernández enumeró ayer las ventajas de la incorporación de este cuarto acelerador lineal en el HUCA: «Permitirá eliminar por completo la demora, aumentar la cartera de servicios, disminuir las derivaciones a otras autonomías, incrementar el número de sesiones anuales y ofrecer un servicio más eficaz».

Quinta resonancia magnética

El Hospital Central también incorporará la que será su quinta resonancia magnética, específica para el servicio de Oncología Radioterápica y que aportará «información crucial para delimitar, de modo mucho más preciso que el TAC, el tumor que se debe tratar, además de facilitar la planificación del tratamiento». Es muy útil, señala el informe elaborado por la Consejería de Sanidad, en el abordaje de fibromas uterinos y ablación de tumores de próstata, de mama y de hígado.

El Intrabeam, que costará cerca de 700.000 euros, es una novedosa máquina que permite simultanear cirugía y radioterapia. Lograría, por ejemplo, que muchas pacientes con cáncer de mama que deben someterse a una cirugía conservadora y tratarse luego con radioterapia pudieran hacerlo todo al mismo tiempo. El presidente del Principado señaló que, para la incorporación de estas máquinas en el HUCA «partimos con dos ventajas». La primera, que cuenta con las infraestructuras físicas necesarias. De modo que solo debería acometerse la instalación eléctrica y la conectividad de los equipos. La segunda, que todo el personal de radioterapia y diagnóstico por imagen cuenta con «la formación necesaria para sacar el máximo rendimiento a la nueva tecnología de forma inmediata».

Eso, en lo que se refiere al HUCA. Porque la «deslumbrante», según el propio Fernández, aportación de la Fundación Amancio Ortega también se dejará notar en otros hospitales de la región. En concreto en los de Cabueñes, San Agustín, Valle del Nalón y Jarrio, que estrenarán cuatro mamógrafos digitales de nueva generación, valorados en algo más de 200.000 euros cada uno.

En la firma del acuerdo estuvieron presentes también Belén Fernández, física médica del HUCA; Francisco Manuel González, jefe del servicio de Medicina Nuclear; Germán Juan Rijo, de Oncología Radioterápica del HUCA, y María del Mar Pérez-Peña, presidenta de la Sociedad Asturiana de Radiología.

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