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Estado en el que llegó el pitbull, abatido a tiros, a la sociedad protectora de Mieres.
La Fiscalía investiga la muerte a tiros de un perro en Mieres

La Fiscalía investiga la muerte a tiros de un perro en Mieres

La sociedad protectora El Trasgu denuncia a un ganadero de San Tirso tras realizar la necropsia al can, que fue apaleado estando aún con vida

Alejandro Fuente

Miércoles, 16 de julio 2014, 00:15

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La Fiscalía investiga la muerte de un perro asilvestrado por un ganadero de la zona de San Tirso de Mieres. Las diligencias se han abierto tras interponer una demanda la sociedad protectora de animales El Trasgu -que gestiona la perrera municipal-, en colaboración con Equo, y tras la necropsia realizada al animal.

Según el informe realizado por la Universidad de León, el animal recibió al menos un tiro de un arma de fuego -al parecer una pistola-y habría sido brutalmente apaleado cuando aún estaba vivo. Asimismo, el análisis veterinario determina que también recibió golpes 'post mortem'. La investigación determinará si el presunto autor de la muerte está en posesión del pertinente permiso de armas.

La versión ofrecida por el ganadero dista mucho del informe de la necropsia. Al parecer, el perro formaba parte de un grupo, con otros dos canes, que estaba causando daños en su rebaño. De hecho, ya denunció el caso ante el Ayuntamiento el pasado mes de mayo. Fuentes municipales aseguraron ayer que, de hecho, se pidió la intervención de la Guardería del Principado para resolver el problema. Al mismo tiempo, la propia sociedad protectora colocó trampas para intentar capturar a los animales.

Fue en este periodo cuando el ganadero pidió la intervención del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil tras abatir a uno de los perros. Informó entonces que se había visto forzado a matar al animal tras ser atacado él y su mastín.

Ahora, la Fiscalía debe determinar la existencia de un posible delito de maltrato animal del ganadero. De hecho, cabe la posibilidad de que los golpes al pitbull, tras su muerte, pudieran estar hechos para disimular los tiros, aunque es una posibilidad aún sin esclarecer.

La situación se suma a los últimos casos de envenenamientos de animales habidos en el Caudal. Recientemente, saltaron las alarmas tras registrarse varios casos en Figaredo. El último ocurrió en Riosa, cuando varios perros fueron intoxicados con 'Babosil', veneno utilizado para babosas y caracoles y capaz de causar la muerte de animales más grandes como perros o, incluso, de niños.

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