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ALEJANDRO FUENTE
Sábado, 28 de febrero 2015, 00:19
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santa eulalia. La Guardia Civil desplegó ayer un amplio dispositivo de búsqueda para detener al presunto autor de un atraco en la sucursal de Cajastur (Liberbank) en Santa Eulalia de Morcín. Todo sucedió muy rápido. El asaltante, un varón, esperó a que llegara la hora de cierre de la oficina para perpetrar su plan. Accedió al interior de la oficina disfrazado con una peluca de mujer y unas gafas que le ocultaban el rostro.
Entró con una pistola cuando, en el interior, se encontraban una empleada y un cliente que fueron retenidos durante unos minutos. Se desconoce la cantidad que pudo sustraer. No obstante, fuentes cercanas a la investigación del caso señalaron que ninguno de los dos sufrieron daño personal alguno.
La Guardia Civil recibió la llamada del aviso -procedente del Servicio de Emergencias del 112- a las 14.19 horas. Rápidamente se movilizaron varias patrullas que se desplazaron hasta el lugar. La sucursal está ubicada en la urbanización Monsacro, a muy pocos metros de la carretera Nacional 630, que comunica Oviedo con Mieres. Es una zona residencial muy tranquila y, a esa hora, no había viandantes. La alarma llegó al barrio cuando los vecinos vieron llegar numerosos coches patrulla y comenzaba la investigación para determinar la identidad del autor del robo.
De hecho, el atracador actuó con mucha rapidez. La Guardia Civil todavía desconoce si la pistola utilizada era de fuego real o simulada. La Benemérita movilizó a todos sus efectivos en el concejo, en Ribera de Arriba y Oviedo para localizar al sospechoso. También se investiga si actuó en solitario o tuvo apoyo, especialmente en la huida del lugar de los hechos.
En busca de pistas
La investigación corre a cargo de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Oviedo. Ayer, los agentes, acompañados por responsables de la entidad bancaria, buscaban toda la clase de indicios que pudieran ayudar a la investigación . Al cierre de esta edición aún no se había informado de arresto alguno. El alcalde del municipio, el socialista Jesús Barbao, estaba pendiente ayer de cualquier novedad del caso y recordaba que no es la primera vez que los ladrones se fijan en Morcín para cometer sus fechorías. No obstante, destacó que son casos muy aislados.
El último robo, en Ciaño
El último atraco registrado en un municipio de las cuencas mineras tuvo lugar el pasado mes de diciembre en Ciaño, en Langreo. Entonces fue un hombre de unos sesenta años, con una gorra en la cabeza, vestido con ropa de 'sport', que amenazó a un empleado también de Cajastur con una pistola. En el suceso el ladrón solo se pudo llevar el dinero que había en los mostradores.
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