Los ediles del PSOE de Aller respetan que el alcalde no renuncie porque «es inocente»

El futuro del Ayuntamiento de Aller y de su alcalde, David Moreno, depende de lo que decidan los cinco ediles del PSOE. Tras el inicio del proceso de expulsión del regidor por parte de la Federación Socialista Asturiana (FSA) -al abrirse juicio oral por un presunto delito de prevaricación administrativa-, éste mantiene que es inocente y anuncia que no va a renunciar al acta de concejal, tal y como le exigió su propia formación. Los escenarios posibles son muchos. El resto de ediles socialistas puede decidir apoyarlo de forma incondicional, arriesgarse a ser también expulsados y formar un grupo de no-adscritos, o puede presentar una moción de censura contra su propio alcalde para mantener el gobierno local.

Pero en el seno de este grupo hay dudas. «Respetamos la decisión de Moreno, porque entendemos que es inocente en el caso de prevaricación», señala la actual teniente de alcalde, Sandra Jovellanos. Pero no aclara la postura final de los cinco. «Es algo que tendremos que decidir», dice a la vez que adelanta que dicha decisión se tomará esta misma semana. En el caso de mantener se bajo la disciplina socialista, el PP ya ha anunciado que no moverá un dedo para promover una moción de censura contra el PSOE, siempre y cuando estos presenten un candidato alternativo a Moreno. En el caso contrario, la FSA perdería toda representación en este Consistorio y los populares iniciarían los pasos para arrebatar la Alcaldía al actual regidor.

En segundo de los casos se abren más incógnitas. Teniendo en cuenta la aritmética y la fragmentación del Pleno, el PP (con cuatro ediles) necesita -en cualquiera de las diferentes ecuaciones- el apoyo de IU (tres concejales). Aun así, habría que sumar otros dos para lograr los nueves obligatorios que se precisa en este proceso y lograr una mayoría absoluta. En esta cuenta podrían entrar los dos de Foro Asturias, la edil de Xente por Aller o el independiente.

«En rebeldía»

«No tenemos miedo a ese proceso», afirma Jovellanos. Y es que estas formaciones ya tuvieron oportunidad en la investidura de mayo de 2015 de apartar a Moreno de la Alcaldía y no llegaron a acuerdo alguno. No obstante, señala Antonio del Peño, portavoz del Partido Popular, «la situación es ahora completamente diferente, pues tenemos a un alcalde en rebeldía con su propio partido».

Ya propuso, a través de EL COMERCIO, la articulación de un gobierno de «emergencia democrática», con la unión de las distintas formaciones de la Corporación, para echar a Moreno si el PSOE no corrige de forma interna esta situación.

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