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De izquierda a derecha, Saúl Craviotto; el director adjunto de EL COMERCIO, Ángel M. González; Marifé García Tuñón, de Deportes Tuñón; Alberto Ecker, de Radio Ujo; Enrique Espina, del Club Patín Mieres; el director del Museo del Ferrocarril, Javier Fernández; y Joaquín Aza y José Antonio Gómez, de Panadería Casa Antón. Soraya González, en su administración.
Premio al trabajo y la solidaridad

Premio al trabajo y la solidaridad

La asociación Mierense del Año entrega sus galardones ante un auditorio lleno

ALEJANDRO FUENTE

Sábado, 29 de abril 2017, 02:13

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Con un sonoro aplauso de un auditorio de la Casa de Cultura que estaba completo. Así fueron recibidos los galardonados en la cuadragesimocuarta edición de los premios que otorga la asociación Mierense del Año. El director del Museo del Ferrocarril de Gijón, Javier Fernández; el presidente de la asociación cultural y recreativa Radio Ujo, Alberto Ecker; y el colaborador del Club Patín de Mieres, Enrique Espina. Todos pasaron bajo un arco de honor que formaron con sus 'sticks' los chavales del equipo de hockey y con el sonido de las gaitas de la banda Villa de Mieres.

Junto a ellos, estaban quienes este año han sido reconocidos por el colectivo con la placa de honor. Entre ellos, el diario EL COMERCIO, representado en el acto por el director adjunto, Ángel M. González. También, Marifé García Tuñón, quien recogió la medalla concedida a Deportes Tuñón. El reconocimiento al mérito empresarial recayó en Panadería Antón, en los emprendedores Joaquín Aza y José Antonio Gómez, y el premio Visiola Rollán al deporte amateur fue para el piragüista Saúl Craviotto.

Javier Fernández fue el encargado de agradecer ante el público, las autoridades y los miembros de la propia asociación el haber obtenido este premio. Así, destacó que considera que el galardón que él recogió «no es para mí solo, es para toda la gente que está trabajando desde hace tantos años en la conservación y difusión del patrimonio industrial y ferroviario de Asturias y de Mieres». El director del museo gijonés también destacó la labor «desinteresada» de todos los galardonados en esta edición. Especial mención dedicó a EL COMERCIO, «que es la historia del Principado hecha letra a letra; como decano de los periódicos asturianos, es mucho más que una cabecera». Fernández finalizó su intervención destacando que Asturias y Mieres «tienen el futuro que nosotros construyamos, pero que se tiene que basar en la tradición industrial y minera, en el buen hacer y en la tradición del trabajo». «Hay fomentar la labor de estos premiados que trabajan de forma desinteresada por la gente», añadió.

«Información seria y rigurosa»

El presidente de Mierense del Año, Laudelino Rodríguez 'Tito', entregó a Ángel M. González la placa de honor. El director adjunto de EL COMERCIO destacó que esta distinción «supone un acicate para mantener e incrementar nuestro trabajo informativo y la cita diaria con los lectores». También subrayó el compromiso con los mierenses a través de «una información seria, rigurosa y plural». González alabó la larga trayectoria e importancia de los galardones Mierense del Año. «Recibir esta distinción nos llena de orgullo», añadió.

Por su parte, Saúl Craviotto, leridano de nacimiento, señaló que en Mieres y en Asturias se encuentra «como en casa» y aseguró que sigue trabajando para tratar de estar en los Juegos Olímpicos que se celebrarán en Tokio.

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