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Llamazares, convencido de poder aportar para una mayoría de izquierdas

Llamazares, convencido de poder aportar para una mayoría de izquierdas

El cabeza de lista de IU lamenta también la «salida en falso» del sistema bipartidista en Asturias con la irrupción de Foro «por la vía del neocaciquismo conservador»

EFE

Lunes, 4 de mayo 2015, 12:20

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Quince años después de alejarse de Asturias para ocupar un escaño en el Congreso y sustituir a Julio Anguita al frente de IU, Gaspar Llamazares vuelve a encabezar la candidatura de la coalición en el Principado "con las mismas ideas", pero con más experiencia y convencido de que tiene mucho que aportar para que no se pierda la oportunidad de liderar una mayoría de izquierdas.

"Yo vengo para eso y no vengo para otras cosas", afirma Llamazares (Logroño, 1957) en una entrevista ante sus terceras autonómicas como candidato en Asturias tras superar en las primarias al coordinador general de la coalición, Manuel González Orviz, una bicefalia que, asegura, funciona "de manera normalizada".

El cabeza de lista de IU lamenta que su formación no se anticipase a la indignación generada por la crisis para transformarse en una formación "de nuevo tipo" que en algún momento ve necesario impulsar y que esa apuesta la ganara Podemos al haber minusvalorado los grandes partidos las elecciones europeas.

De haberlo hecho entonces, afirma, ni IU ni la formación que lidera Pablo Iglesias tendrían que afrontar ahora las autonómicas con una perspectiva "defensiva" que pasa para los primeros por preguntarse cuánto perderán respecto a las expectativas que levantaron y para la coalición por intentar mantener su espacio.

"Si nos hubiéramos dado cuenta de que era el momento de dar el paso, el conjunto de la izquierda sería segunda o tercera fuerza política con representación en el Parlamento Europeo. Las autonómicas serían un paso importante y habríamos sido determinantes en las generales", asegura.

No obstante, y de cara a una legislatura con un Parlamento fragmentado, considera imprescindible tener "experiencia, capacidad y voluntad de diálogo" a partir de la identidad de cada partido "para corresponder a la expectativa de los ciudadanos".

Llamazares lamenta también la "salida en falso" del sistema bipartidista en Asturias con la irrupción de Foro "por la vía del neocaciquismo conservador" y defiende la trayectoria de IU rechazando ese modelo tanto cuando pactaron gobiernos con el PSOE como cuando optaron por mantenerse en la oposición.

"Decir que somos la muleta del PSOE es una caricatura injusta sólo explicable en quien llega a la política y se cree Adán y que con él empieza todo. A veces los 'sillones' son de faquir y no precisamente cómodos", subraya tras defender "con orgullo" logros obtenidos mediante acuerdos con los socialistas como el salario social.

Así, reclama más "modestia" de Podemos que, advierte, ya ha hecho "rebajas" en su programa antes incluso de llegar a las elecciones, y apela a la distinción entre "ser puro y ser puritano" para referirse a propuestas de este partido como reducir el sueldo de un diputado autonómico a tres veces el salario mínimo. "No es muy distinto de lo que hace IU -que recibe una parte de los ingresos de sus parlamentarios-, pero ni hacemos alarde de ello", advierte.

Llamazares recuerda como "un acierto" la decisión de la militancia de IU en Asturias de no reeditar hace tres años un gobierno de coalición con el PSOE que, augura, podría haber terminado en ruptura dada la gestión de un gobierno presidido por Javier Fernández que acabó pactando sus últimos presupuestos de la legislatura con el PP

En dicho periodo, incide, ha visto a un PSOE asturiano "desdibujado" y sin identidad propia en su modelo social -"esperaba un mayor acierto con la sanidad, pero han ido bronca tras bronca"- y a un Ejecutivo con pocas ganas de intervenir en la política española más allá "de algún pataleo", pero sin dar "el do de pecho" en cuestiones como el progresivo desmantelamiento de la minería.

A este análisis se añade ahora la nueva propuesta del PSOE para rebajar el impuesto de sucesiones "sin explicar si los 150 ó 200 millones que se perderán los recortarán de inversiones o de la gasto social" lo que demuestra que buscan mantener el espacio del centro político "y vuelven a lo de Zapatero, de que bajar impuestos es de izquierdas. Reordenarlos sí, pero bajárselos a los ricos no lo es".

Para Llamazares, su prioridad en el ámbito autonómico pasa por un plan de emergencia social que permita recuperar derechos recortados, paralizar desahucios o convertir el salario social en una renta mínima sin olvidar, advierte, que la política "consiste en gestionar las frustraciones, no sólo en gestionar las ilusiones".

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