Somos Carreño pide alternativas a la ubicación de la perrera en el concejo

Somos de Carreño solicitó ayer a la alcaldesa del municipio, la socialista Amelia Fernández, que «busque alternativas consensuadas con todas las partes y, en especial con los vecinos y afectados», para ubicar el albergue de animales.

La formación política considera que la primera edil ha cometido una «irregularidad» al anunciar días atrás la decisión unilateral del equipo de gobierno de rechazar el equipamiento canino al amparo de un informe de la Comisión de Urbanismo y Ordenación del Territorio de Asturias (CUOTA). Desde su punto de vista, esta medida debe ser adoptada por el Pleno, dado que el PSOE no cuenta con la mayoría suficiente.

La franquicia de Podemos en Carreño -que cuenta con cuatro concejales- considera que, con estas declaraciones, la alcaldesa «busca mejorar la imagen bastante deteriorada del gobierno socialista en relación con este proyecto». «Se trata de una iniciativa que defendió durante el pasado mandato en contra de la posición mayoritaria de los vecinos de la zona», apuntan

A todo lo expuesto anteriormente, precisan que en el informe remitido al Ayuntamiento «la CUOTA rechaza la construcción de una vivienda incluida en dicho proyecto por ser incompatible con el carácter no urbanizable de la parcela. Pero lo cierto es que admite tanto la guardería de perros y gatos como la clínica veterinaria por considerar que dichos servicios son de interés público». Por todo ello, añaden, «es evidente que el máximo organismo regional en materia de Urbanismo «no cuestiona la parte más sustancial del proyecto».

Esta iniciativa de la Fundación Protectora de Animales de Asturias contó con la aprobación inicial del Pleno de Carreño en la sesión celebrada en julio del pasado año. El acuerdo se adoptó pese al fuerte rechazo de los vecinos de la parroquia de Tamón afectados por el plan. Ahora, una vez conocida la interpretación que hace la CUOTA al respecto, el proyecto -insiste Somos- deberá trasladarse al Pleno para ser sometido al debate final para su rechazo o aprobación. La instalación propuesta por la Fundación Protectora de Animales de Asturias ocupa dos parcelas de 30.000 metros cuadrados. Incluye una clínica veterinaria y vivienda para las personas que cuidarán a los animales, un edificio para recepción y servicios. El equipamiento se completa con cuatro perreras con capacidad para 40 animales cada una, una gatera y una zona destinada a estacionamiento.