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Vista general del incendio declarado el domingo en Sorriba, ya controlado.
Controlados los ocho fuegos que ayer continuaban activos en el Suroccidente

Controlados los ocho fuegos que ayer continuaban activos en el Suroccidente

La lluvia y el descenso de temperaturas ayudaron en la extinción. Los mayores problemas se registraron en el incendio de Santana, en Cangas

LIDIA ÁLVAREZ

Jueves, 30 de julio 2015, 00:35

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La lluvia y el descenso de temperaturas contribuyeron ayer a facilitar la intensa labor de los efectivos que durante los últimos días han trabajado sin descanso en la extinción de los incendios forestales detectados en los concejos de Allande, Cangas del Narcea y Tineo. A media mañana, el Principado rebajó el nivel de alerta del plan de incendios al nivel cero de seguimiento, aunque a última hora de la tarde continuaban activos ocho focos. De ellos, siete se daban por controlados, lo que supone que se había conseguido detener su avance, y el octavo, estabilizarlo.

Este último es el de Santana, en Cangas del Narcea, donde ayer se registraron los mayores problemas. Las intensas llamas, visibles desde la capital del concejo durante toda la madrugada del miércoles, tuvieron en vilo a vecinos y servicios de extinción. En este concejo, además, la lluvia apenas se dejó ver y la intensa niebla impidió a los medios aéreos trabajar con normalidad. A última hora de ayer continuaban trabajando en la zona doce efectivos, entre bomberos del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias y trabajadores de empresas forestales. Más tranquila fue la jornada para los vecinos de Castañera, en Tineo, que tuvieron que ser desalojados en la tarde del martes, pero que pudieron regresar a sus casas esa misma noche. También se llegó a plantear evacuar otros dos pueblos cercanos, aunque finalmente no fue necesario. El regidor tinetense, José Ramón Feito, explicaba que el martes «fue uno de los días más complicados desde que soy alcalde». El fuego iniciado el domingo en la parroquia de Sorriba, y que se extendió hasta Ponte y El Rodical, obligando a cortar la carretera AS-215, ha sido de los más devastadores. Las labores se centraban ayer en los flancos de Armayán y Berzana. En el Valledor, en Allande, donde a última hora del martes se reactivaba el fuego en uno de los perímetros, también se dio por controlada la situación. Los cuatro batallones de la Unidad Militar de Emergencias que fue necesario desplazar, regresaban por la tarde a su base en León, mientras continuaban en la zona bomberos del Sepa, brigadas forestales, cooperativas y agentes de Medio Natural.

Hoy se realizará una revisión de los incendios, en los que siguen las tareas de control y perimetración.

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