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D. S. F.
Martes, 25 de abril 2017, 00:14
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El campo de fútbol de La Roja sufrió en la madrugada de ayer un nuevo robo. En esta ocasión se llevaron la batería del generador, así como unos 250 metros del cable de cobre que surtía de electricidad tanto a las instalaciones del campo como el polideportivo.
En menos de un año este campo ha sufrido ya ocho robos, cuatro de ellos en el generador, dos de cable y otros dos de gasoil, con una cuantía que ronda los 2.000 euros. Es una situación que preocupa al club ya que «no sabemos si el seguro se hará cargo otra vez más», apuntaba preocupado el presidente del club deportivo Marino Cudillero, Avelino González.
El Marino ya ha informado a la Federación Asturiana de Fútbol para que permita el próximo fin de semana jugar a los equipos de las categorías alevín e infantil en las instalaciones pixuetas a pesar de no poder contar con agua caliente. González manifestó ayer su preocupación ante la posibilidad de que el comité de árbitros refleje esta situación en el acta, y el club sea sancionado. El Marino jugará fuera de casa el próximo partido, pero debe enfrentarse en casa al Rayo Villalegre el 7 de mayo.
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