El Ayuntamiento insistirá en la mejora de las travesías de El Peral y La Franca

Llegó el ansiado final de las obras del Unquera-Llanes pero no se han terminado los flecos sueltos. Y es que Ribadedeva había solicitado una serie de cuestiones, vinculadas a la obra, que aún hoy penden de un hilo en su mayoría. Por un lado, tras varias solicitudes y manifestaciones públicas de los propios vecinos, el Ayuntamiento planea insistir en los próximos días en la necesidad de llevar a cabo una actuación de mejora en las travesías de El Peral y La Franca. La carretera nacional 634 cruza estas dos localidades y, la intención del equipo de gobierno socialista es que «su aspecto se llegue a asemejar al de otros pueblos como San Roque del Acebal o Vidiago, con aceras, muchos más puntos de luz e incluso carriles de incorporación y mejores accesos a otros núcleos», detalló el alcalde, Jesús Bordás.

Ahora los planes son «instar de nuevo a la Delegación del Gobierno para que, al menos, se lleven a cabo una serie de arreglos que mejoren un poco la seguridad de las travesías». Entre otras cuestiones, las actuaciones más urgentes serían «el pintado de pasos de peatones, el refuerzo de la señalización -por ejemplo con la instalación de semáforos de aproximación-, o la delimitación de una senda ciclista, aunque sólo sea con pintura».

A la espera de noticias sobre este proyecto, hay otra de sus más urgentes peticiones a Carreteras que parece que sí va tomando forma. Este pasado viernes el Ayuntamiento recibía comunicación de la Administración central confirmando que «se estudiará» la viabilidad de crear una salida a la carretera nacional 634 desde la localidad ribadedense de Bustio. La petición había sido realizada hace unas semanas por el alcalde ribadedense, el socialista jesús Bordás, recogiendo una demanda histórica de los vecinos de esta localidad y que se había reactivado tras la reciente apertura del tramo de la A-8 entre Unquera y La Franca.

Caminos auxiliares

Para el desarrollo de las obras de la A-8 se dotó la Unión Temporal de Empresas (UTE) de una báscula para el pesaje de camiones y una nave contigua que, ahora, quiere quedarse el Ayuntamiento. Mientras la primera se destinaría a pesar los camiones de paja que compran los ganaderos del concejo, los cuales ya se han quejado de algún que otro fraude, la segunda sería, palabras textuales de Bordás, «muy útil para el Consistorio». Todo ello se pretende adquirir «si nos supone un coste muy reducido».

Finalmente, en el aire está aún la concesión de dos caminos que también solicitaba el equipo de gobierno a la Delegación del Gobierno en Asturias, para que se permitiese su uso definitivo, tras ser habilitados para el desarrollo de las obras. Se trata de los pasos denominados camino de obra del 'viaducto río Cabra' y camino de servicio obra 'muro 6'.

El primero, «facilitaría considerablemente el acceso a la finca municipal número 90 del polígono 13, actualmente dividida en dos por el viaducto del río Cabra». En el segundo caso, «se facilitaría, por un lado, el servicio de acceso a las fincas de la zona y, por otro, se estaría generando un paso alternativo a la N-634 para peatones y cicloturistas». Sobre ellos no se ha recibido contestación alguna.

Son temas pendientes tras la conclusión de una obra que ha supuesto un antes y un después para el concejo de Ribadedeva.