El queso de los Beyos se comercializará como IGP en «tres o cuatro meses»

Sería el mejor de los panoramas de cumplirse el plazo. El queso de los Beyos se empezará a comercializar como Indicación Geográfica Protegida (IGP) «en tres o cuatro meses». Así lo anunciaba ayer el subdirector general de Calidad Diferenciada y Agricultura Ecológica del Ministerio de Agricultura, Rafael Bolivar, que se desplazó hasta Amieva para formar parte de la puesta de largo del sello. Lo dijo con prudencia pues, recordó, el proceso electoral quizá pueda «entrañar alguna dificultad en esta segunda fase en la que nos encontramos».

El retraso acumulado desde que se aprobara la IGP hasta que se han podido dar pasos afianzados se debe, sobre todo, «a la ausencia de un órgano gestor dentro del ámbito de los propios elaboradores», valoró Bolivar. Es decir, el hecho de que fuese solo una asociación y no un consejo regulador el que iniciase los trámites pudo se una traba «quizá por l a inexperiencia de los propios queseros en un terreno más burocrático».

De hecho, fueron ellos los que solicitaron ayuda al Ministerio de Agricultura «para la elaboración de los pliegos de condiciones que rijan el contraetiquetado». Así lo apuntaba Marino González, presidente de la Asociación de Productores de los Beyos. «Se contrató a una empresa externa para su redacción y a día de hoy estamos un paso más cerca de sacar a la venta las piezas con las nuevas etiquetas».

Bolivar insistió en que el Gobierno estatal «tiene la obligación moral e institucional de ofrecer todo el apoyo necesario», sobre todo teniendo en cuenta que se caía en el riesgo de que «al cabo de un tiempo, si la IGP no tienen actividad, se podría perder su registro». A partir de ahora, recordó, «el recorrido pendiente dependerá de los propios elaboradores». Los controles de calidad propios de un sello como la IGP se realizarán directamente a través del Ministerio, que se encargará de que «las cosas se hagan bien y que las piezas salgan al mercado respondiendo a los pliegos de condiciones».

Marino González recordó que son únicamente tres las queserías que trabajarán bajo este certificado, Pregondón, Picu Sella y La Collada, las tres del concejo de Amieva. Sus titulares emprendían ayer con ilusión esta nueva etapa, aunque con dudas pues, bajo su punto de vista, lo que les falta es «unión».

Hay también productores de los Beyos en Ponga y en el concejo leonés de Oseja de Sajambre. Es precisamente allí donde el presidente del colectivo indicó que «nos faltan relaciones institucionales con Castilla y León». Por ello apeló a la ayuda Estatal pero, también, a la regional cuyos representantes ayer no acudieron a la presentación celebrada en el Ateneo de Sames, en Amieva.

Sí lo hizo el teniente de alcalde amievense, Evaristo Parrondo, en sustitución al regidor que se encuentra de viaje. Quiso celebrar, como no podía ser de otra manera, este impulso que parece definitivo para una variedad quesera que tienen gran arraigo en el municipio. Tampoco quiso faltar la alcaldesa de Ponga, quien recientemente anunciaba que la próxima edición del certamen de los Beyos, que tendrá lugar la próxima semana en Beleño, estará abierta a queseros de otros concejos.

Garantía de calidad

El responsable estatal indicó que España «es el segundo país de la Unión Europea con mayor número de figuras de calidad reconocidas». De la IGP de los Beyos auguró que, una vez comience su comercialización con el contraetiquetado, «se mostrarán al consumidor una serie de características que dan garantía de lo que está adquiriendo y consumiendo».