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En primer término un cartel instalado por el Ayuntamiento de Herrerías en el límite del municipio y al fondo otro indicando la entrada al Principado de Asturias.
¿Dónde está la frontera entre Asturias y Cantabria?

¿Dónde está la frontera entre Asturias y Cantabria?

Peñamellera Baja y Herrerías discrepan sobre el límite entre el Principado y la región vecina

TERRY BASTERRA

Miércoles, 25 de mayo 2016, 00:21

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La frontera entre Asturias y Cantabria puede no ser exactamente la que dibujan los mapas. Al menos en lo que afecta a un tramo de entre 3 y 6 hectáreas de nombre Pozobal situado entre el concejo de Peñamellera Baja y el municipio cántabro de Herrerías. Así lo entiende al menos este último Ayuntamiento.

Este Consistorio tiene en marcha un proceso de deslinde que, de salir adelante en base a sus planteamientos, permitiría a Cantabria ganar una pequeña porción de superficie en detrimento de Asturias. El terreno en sí es de uso ganadero, principalmente pastizales. En él tan sólo hay dos construcciones, dedicadas a la actividad del sector primario. La sintonía entre los dos ayuntamientos es buena. Sus alcaldes no quiere que por esta discrepancia se pueda generar un conflicto entre dos territorios vecinos que mantienen unas correctas relaciones. Eso sí, cada uno defiende lo suyo y sus posturas son diferentes. Las discrepancias surgen de la interpretación diferente que hacen estas dos administraciones locales de los documentos que trazan la frontera entre Asturias y Cantabria. «Nosotros nos basamos en un mapa de 1928 del Instituto Geográfico Nacional (IGN)», indica el popular José Manuel Fernández, alcalde de Peñamellera Baja. Precisamente es este documento en el que se basa la frontera oficial que aparece en todos los mapas. Aunque otros registros, como el catastro, sitúa los dos únicos inmuebles enclavados en la zona afectada en Cantabria, cuando en el mapa figuran en Asturias.

«Herrerías no está de acuerdo con esa línea. Es cierto que han desaparecido varios mojones que marcaban el límite entre Asturias y Cantabria y que hay discrepancias entre los dos territorios en este asunto», explica el alcalde peñamellerano, quien indica que hace cerca de dos meses personal de estos dos ayuntamientos y del IGN realizaron una visita de campo al lugar con el fin de tratar de zanjar esta discrepancia.

El último movimiento en esta partida lo llevó a cabo hace unas jornadas el Gobierno de Cantabria. La pasada semana el consejero de Presidencia y Justicia cántabro, Rafael de la Sierra, visitó Herrerías y se reunió con su alcalde, el regionalista Francisco Linares, a quien ofreció los medios técnicos y estudios necesarios que pueda realizar el Ejecutivo de la comunidad autónoma vecina en este proceso de deslinde.

Los dos políticos cántabros consideran que es posible «dar una solución amistosa» a esta disputa. Y es que no quieren que por esta cuestión se tenga «que llegar a un conflicto territorial» con Asturias, con la que las relaciones «siempre han sido buenas».

Similar es la postura de José Manuel Fernández, que huye de la palabra conflicto, pero se mantiene en que el problema no sólo afecta al límite de Peñamellera Baja. «Es la frontera de Asturias», recuerda. Y por ello entiende que el Principado debe respaldar a este consistorio de la comarca oriental de igual modo que el Gobierno de Cantabria hace lo propio con Herrerías. «El Ayuntamiento de Peñamellera Baja y el Principado estudiaremos los informes y defenderemos el territorio. Existen discrepancias en varios documentos pero la gente mayor conoce perfectamente las fronteras, aunque ya no estén los mojones. La zona puede tener una extensión de 100 metros de largo. Es monte y pastos. Los más afectados por esta situación son los ganaderos», indica Fernández. Desde Herrerías Francisco Linares tiene una visión algo distinta y explica que estas discrepancias por los límites entre un municipio y otro no son nuevas, sino que se remontan incluso hasta el siglo XVIII. «Los problemas con estas fincas vienen de atrás. Nosotros pensamos que hay un error en el último límite marcado por el Instituto Geográfico Nacional. Tiene otros fallos como que aparecen dos riegas con el nombre de Escajera cuando sólo hay una, o que al mojón que está donde El Pernal lo llama Pontillo de Piedra, cuando este es otro distinto», indica el alcalde cántabro, quien añade que «el propio IGN en algún documento reconoce errores y habla incluso de falsa divisoria».

Estas cerca de seis hectáreas objeto de la discordia pertenecen a «entre seis y ocho» personas distintas. «Sus antepasados aseguraban que el terreno donde están las fincas en el pasado perteneció a Cantabria», recalca Linares. Esta amistosa disputa territorial se reactivo, según indica el alcalde de Herrerías, cuando este consistorio decidió colocar vallado en la zona para que las vacas de Cantabria que pastan en este lugar no se adentren en Asturias y viceversa, para tener así un mayor control sobre las reses y evitar cualquier posible contagio de una hipotética enfermedad que afectase al ganado de una u otra parte de la frontera.

Ambos ayuntamientos quieren que estas discrepancia se solucionen de forma amistosa. Pero los dos cuentan con documentos que avalan su postura. La resolución parece que tendrá que venir de más altas esferas y se prevé que pueda alargarse en el tiempo.

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