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EVA FERNÁNDEZ
Viernes, 9 de diciembre 2016, 00:31
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El patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Santa María de Sábada, Julián Fernández, iniciará en los próximos días una serie de reuniones informativas con las diferentes asociaciones del pueblo de Lastres para informarles del proyecto que les ha presentado la empresa asturiana Mar Abierto Mejillones del Cantábrico que pretende montar una planta de cría de estos moluscos bivalvos frente a Punta Escalar, en el municipio de Caravia. Informado el pueblo, según indicó Fernández, el siguiente paso será reunir a la junta directiva de la Cofradía y votar su entrada, con un 25% de participación, en el accionariado de la sociedad mejillonera.
Julián Fernández destacó que «a nosotros no nos molesta para nada el criadero en nuestras labores de pesca porque es una zona en la que no hay percebe y, sin embargo, tiene una gran riqueza para ellos y su producto porque las corrientes del Norte que hay en esa zona harán que de ahí salga un mejillón con una calidad espectacular, nada que ver con el que se obtiene en las rías gallegas con sus bateas en las aguas paradas».
Mejor que el gallego
El presidente de los pescadores llastrinos, además de justificar porqué el mejillón Cantábrico será mejor que el gallego, también destacó la riqueza que puede atraer para la zona un proyecto de esta envergadura en un momento en que hay demanda de este producto y que, según advirtieron ya los promotores, es un sector en auge. El patrón mayor, a título personal, se mostró partidario de apoyar esta iniciativa aunque hizo hincapié en que «esté o no de acuerdo la Cofradía, si la ubicación es viable para esta actividad, el proyecto saldrá adelante».
Esta iniciativa, abierta ahora a exposición pública durante 30 días naturales para que sus detractores puedan presentar alegaciones, ha empezado su tramitación en el Principado tras la presentación de la correspondiente solicitud, por parte del gerente, Manuel Serrano, para conseguir la autorización administrativa, estudio preliminar de impacto ambiental y concesión de ocupación de terrenos de dominio público marítimo-terrestre para un cultivo marino de mejillones en esta ubicación, situada entre Lastres y Caravia. Dicha solicitud se corresponde a una ocupación inicial aproximada de 34 hectáreas, que acogería once tubos para las crías. Si esta iniciativa va bien, según presentaron los promotores, sería ampliable en un futuro y se empezaría a pensar en la venta, no en fresco, sino en conserva, lo que aumentaría considerablemente el número de empleos proyectados.
«Decida lo que decida la junta directiva será algo de lo que se pueda beneficiar el sector de esta localidad en un futuro» ya que «yo no voy a seguir siempre de presidente y detrás de mí vendrán otros», explicó Fernández en un intento de reivindicar su posición como un trabajador más del mar en el puerto de Lastres. «Es mi opinión personal y soy un cofrade más de los catorce que estamos actualmente», subrayó.
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