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Los integrantes del Llacín tocan delante del Ayuntamiento.
La Banda Gaites Llacín agradece «que nos hagáis sentirnos queridos en casa»

La Banda Gaites Llacín agradece «que nos hagáis sentirnos queridos en casa»

Vítor Carbajal, director de la formación, aseguró también que «el reto ahora es seguir en línea ascendente y dar todavía un paso más»

V. MARTÍN

Domingo, 26 de marzo 2017, 01:53

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Si durante su estancia en Nueva York, y tras el caluroso recibimiento que les ofrecieron familiares y amigos el lunes, los integrantes de la Banda Gaites Llacín fueron conscientes de que realmente eran 'profetas en su tierra', puede que ayer esta sensación se confirmara ya del todo al recibir, en el Ayuntamiento de Llanes, el reconocimiento público y el cariño de sus vecinos.

En una recepción de Alcaldía celebrada en la Casa Consistorial, su director, Vítor Carbajal, comenzó precisamente su discurso con unas palabras que parecen confirmarlo: «gracias por este momento. Gracias por hacernos sentidos en casa». Emocionado, y en nombre de todos sus compañeros, destinó este agradecimiento a las decenas de personas que abarrotaron en la mañana de ayer el Ayuntamiento y que, previamente, les habían arropado con sus aplausos durante el desfile que realizaron por las calles de la capital llanisca. Entre ellas estaba su anfitrión, el alcalde Enrique Riestra, acompañado por integrantes de la Corporación municipal y de representantes de otras entidades e instituciones como el diputado de Foro Pedro Leal.

Los del Llacín están, sin duda, en un gran momento, pero no han llegado a él por casualidad. Como recordaba el propio Carbajal, muchos de los integrantes de la banda «crecieron juntos», tanto personal como musicalmente, e incluso él mismo se incluyó en este grupo, pues comenzó en la formación llanisca «a los diecinueve años y hoy ya han pasado los cuarenta», manifestó delante de todos sus compañeros y amigos. Y es que detrás de su éxito y de todos los reconocimientos que la banda ha recibido, hay muchas horas de esfuerzo y dedicación a la música. De trabajo que no se ve en ensayos que duran horas. De anteponer su espíritu de superación para ser cada día mejores por delante de otras muchas cosas.

Pero la recompensa ha llegado y, ni de lejos, van a conformarse y quedarse donde están. El reto ahora es «seguir en línea ascendente», dar todavía un paso más, confirmaba el director del Llacín ayer, mientras sus compañeros asentían con la cabeza a sus palabras. «Porque las cuestas arriba son muy duras, pero son las que te llevan a las zonas más altas», agregó Vítor Carbajal. Y perseguir nuevos retos y marcarse objetivos aún más ambiciosos seguirá marcando el día a día de la banda y de todos los que la integran.

Además, hubo para ellos en estos días tres momentos «realmente especiales». Uno, fue desfilar por la Quinta Avenida neoyorquina durante el desfile de San Patricio el pasado día 17. El segundo, interpretar el Asturias Patria Querida en Times Square. El tercero, tuvo lugar ayer: descender por la calle Nemesio Sobrino de Llanes, en dirección al Ayuntamiento «y bajar hasta aquí sintiendo el cariño de los de casa».

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