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Uno de los carriles de la N-634 a su paso por Arobes permanece cortado desde la pasada semana.
1,7 millones para consolidar la ladera que argayó hace dos años en Arobes

1,7 millones para consolidar la ladera que argayó hace dos años en Arobes

Las obras arrancaron la pasada semana y tienen un plazo de ejecución de siete meses, durante los que se producirán cortes parciales de carriles

T. BASTERRA/L. RAMOS

Martes, 9 de mayo 2017, 00:09

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El 7 de febrero de 2015, a última hora de la tarde, más de 2.000 toneladas de tierra sepultaban un tramo de la carretera nacional 634 a su paso por la localidad parraguesa de Arobes. El argayo que afectó al punto kilométrico 347 de la vía, de 22 metros de largo y casi tres de alto, obligó a mantenerla cerrada durante casi dos meses y aún después solo se abrió al tráfico uno de los carriles hasta que el 26 de junio del mismo año finalmente se restableció la normal circulación tras numerosas jornadas de intenso trabajo para estabilizar la ladera.

La pasada semana, quienes transitaban por dicha carretera no pudieron evitar el recuerdo de aquel episodio a encontrarse, de nuevo, con uno de los carriles cortado. En esta ocasión, el motivo está relacionado pero es bien diferente: han comenzado las obras de consolidación de las zonas anterior y posterior a la pared que argayó, prometidas hace tiempo por el Ministerio de Fomento. Pese a que el punto afectado ya quedó consolidado con una malla de contención y un falso túnel, los pequeños desprendimientos en el entorno son relativamente frecuentes.

Los trabajos, que están presupuestados en 1.766.000 euros y afectan a un tramo de la ladera de unos 250 metros de longitud, pretenden reducir en la medida de lo posible el peligro de nuevos argayos en una zona especialmente complicada por las frecuentes filtraciones de agua. «El riesgo cero no existe, pero se trabajará para reducirlo al mínimo», aseveraron fuentes del Gobierno central a EL COMERCIO.

El plazo de ejecución previsto para esta actuación es de siete meses, aunque, advierten los técnicos, el calendario podría variar, pues depende en gran medida de las condiciones meteorológicas. Durante todo el tiempo que se mantengan activos los trabajos, la circulación en la N-634 a su paso por el tramo que une las localidades de Arobes y Soto de Dueñas, también en el concejo de Parres, se verá afectada por nuevos cierres parciales que se regularán mediante semáforos.

La actuación que se está ejecutando consiste en la colocación de bulones activos de doce metros de longitud -una especie de 'tornillos gigantes' que se introducen en el terreno, donde quedan anclados- que se encargarán de presionar contra la ladera afectada una red metálica de contención. La diferencia de este tipo de bulones respecto a los pasivos, indicaron desde el Ministerio de Fomento, es que los que se están utilizando en este caso «permiten controlar la presión que se ejerce sobre la pared».

Arreglo de todo el trazado

Hace algo más de un año, en abril de 2016, los alcaldes de Parres, Piloña y Nava ya reclamaron a la Demarcación de Carreteras una mejora importante de esta vía, no solo en el tramo afectado por los desprendimientos, sino en todo su trazado. En opinión de los regidores, es necesario variar el trazado de la carretera en sus tramos más peligrosos, así como reponer el firme en aquellas zonas en las que presenta un mayor deterioro.

«Es una vía que se ha quedado obsoleta por su trazado y éste es un problema que no nos cansaremos de repetir», indicaba a principios de año el regidor parragués, el socialista Emilio García Longo. La carretera, agregó, «soporta un gran tráfico, pues es la que da acceso a toda la parte interior de la comarca del Oriente, y en verano la circulación es aún mayor. En los últimos años solo se hicieron actuaciones puntuales, pero lo necesario es una intervención urgente, variar el trazado y sacar el tráfico de los núcleos», apuntó.

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