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500 bocas solidarias con Bembereké

500 bocas solidarias con Bembereké

La paella se elaboró a coste cero, con productos aportados de forma gratuita por pequeños comerciantes de la zona

guillermo fernández

Lunes, 26 de junio 2017, 08:38

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Al polideportivo de Colombres llegaron en la tarde de ayer 500 comensales para participar en la Paella solidaria, un evento organizado por el Ayuntamiento y Cáritas de Ribadedeva. Tras la comida se sorteó una bicicleta de montaña y numerosos regalos donados por comerciantes de la zona, lo que hizo posible que la recaudación del día ascendiera a 8.000 euros. El dinero se destinará a un centro educativo de la localidad africana de Bembereké, en Benin, donde el sacerdote Alejandro Rodríguez Catalina desarrolla una importante misión que este año orientará los fondos recibidos hacia la enseñanza de Primaria y Secundaria, así como a cursos de alfabetización.

La Paella solidaria alcanzaba ayer su decimotercera edición y surgió a iniciativa de Amador Galán, párroco de Ribadedeva. El sacerdote explicó que «la solidaridad es como el orbayu, algo que tiene que ir calando en nosotros en el día a día. Por ese camino, cuando te das cuenta ya estas empapado». Para Galán «la solidaridad no puede ser huracán que pasa de repente, por eso desde Cáritas estamos en el día a día creando conciencia».

A ocho euros el menú

La secretaria de Cáritas de Ribadedeva, Marina Aja Rodríguez, se encargó, junto a 25 voluntarios, de coordinar el operativo. Adelantó que el precio de la comida era de «ocho euros, más la voluntad» y explicó que el menú estaba formado por «entremeses, paella, postre: pasteles, tarta y corbatas, y bebidas». Se elaboró a coste cero, porque todos los productos fueron «aportados de forma gratuita por pequeños comerciantes de la zona, así como por los supermercados Lupa y Día». Llegados a este punto, Amador Galán, «muy dolido», quiso precisar que «tres grandes superficies muy conocidas en España nos dieron con la puerta en las narices o la callada por respuesta».

De elaborar las dos gigantescas paellas se encargó Turno García Vila, afamado cocinero local que tuvo como asistentas a Patricia Fernández, María del Mar Ortiz de Galisteo y María José Díaz. Como principales ingredientes utilizaron «20 kilos de pollo, otros 20 de costillas de cerdo, 43 kilos de arroz redondo y otros 30 de preparado de marisco».

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