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El exalcalde de Siero José Aurelio Álvarez.
Fallece José Aurelio Álvarez, el primer alcalde del PP del Ayuntamiento de Siero

Fallece José Aurelio Álvarez, el primer alcalde del PP del Ayuntamiento de Siero

Gobernó el concejo entre 1995 y 1999 y estuvo otros ocho años en la oposición en los períodos 1991-1995 y 1999-2003

JOSÉ CEZÓN

Miércoles, 5 de agosto 2015, 00:17

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El exalcalde de Siero José Aurelio Álvarez Fernández falleció ayer a los 51 años de edad en su domicilio familiar de Santolaya, víctima de un cáncer detectado hace algo más de un año. Estaba casado y tenía dos hijas. Licenciado en Derecho por la Universidad, era abogado de profesión y ejercía en su despacho de Pola de Siero. Era también columnista de opinión del diario EL COMERCIO desde hace varios años. El funeral de cuerpo presente será hoy, a las 18 horas, en la iglesia de San Pedro Apóstol de la capital polesa y, seguidamente, recibirá cristiana sepultura en el cementerio parroquial de Santa Eulalia de Vigil.

Álvarez fue el primer alcalde del Partido Popular del concejo de Siero durante el período 1995-1999. Con anterioridad, ejerció como portavoz del principal partido de la oposición durante 1991-1995, con el socialista Manuel Villa como alcalde. Su gran labor de oposición fue reconocida por los vecinos y, en las elecciones de 1995, el PP pasó cuatro a diez concejales y quedó a tan solo un edil de la mayoría absoluta. Álvarez lograba así romper la hegemonía del PSOE y de Manuel Villa, quien llevaba cuatro mandatos consecutivos y dieciséis años de gobierno (1979-1995).

En los comicios municipales de 1999, volvió a ganar las elecciones, pero no logró la mayoría plenaria para mantener la Alcaldía. El primer pacto de gobierno tripartito entre el PSOE, Izquierda Unida y Conceyu de Lugones situó al socialista Juan José Corrales como nuevo mandatario de Siero y relegó a Álvarez de nuevo a la oposición, donde permaneció otros cuatro años hasta su retirada definitiva de la política activa.

Su mandato se caracterizó por la austeridad, la honradez, la voluntad de diálogo y una gran cercanía con el vecindario. Fue un hombre leal al entonces presidente del Principado, Sergio Marqués, e intentó mediar con la mejor voluntad en la grave crisis que se desató en el seno del PP entre el Gobierno regional y el entonces secretario general del partido, Francisco Álvarez Cascos. Su reiterada petición de diálogo le granjeó numerosas enemistades dentro del partido y le provocó un enorme desencanto personal, por lo que puso fin, de forma voluntaria, a su carrera política, pese a que muchos le consideraban como el político con más proyección dentro del PP asturiano.

A partir de su retirada, Álvarez se centró de lleno en su familia y en su profesión de abogado y se mantuvo completamente al margen de todas las tribulaciones internas que vivió su partido, al que se mantuvo fiel hasta el presente. Tuvo varias ofertas para regresar a la política, pero siempre las rechazó de forma tajante.

Valiente y crítico

Hace unos años, comenzó a colaborar con el diario EL COMERCIO, donde firmaba una columna de opinión mensual titulada 'El cuadrilatero', que se publicaba los domingos en la sección de Siero y Centro y que era muy seguida y comentada por los vecinos. Sus opiniones eran valientes y muy críticas tanto con su propio partido como con el resto de formaciones y los sindicatos. Le indignaban los políticos que aspiraban a eternizarse en el cargo, el derroche del dinero de los contribuyentes y la incompetencia en general. La educación era otra de sus grandes preocupaciones.

Álvarez llevó su enfermedad con absoluta discreción para proteger a su familia y siguió ejerciendo su profesión hasta el final de sus días. Su última columna de opinión en este diario apareció publicada el pasado 19 de julio y llevaba por título 'El factor tiempo'.

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