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Jenaro Soto y Valetín Fuente en la sede de la Sociedad de Festejos, antes de anunciar a la pregonera.
La Sociedad de Festejos alerta de que el Carmín corre peligro sin la subvención

La Sociedad de Festejos alerta de que el Carmín corre peligro sin la subvención

«He parado todas las contrataciones hasta saber cuándo vamos a recibir el dinero», explica el presidente, Jenaro Soto

ALICIA G.-OVIES

Sábado, 30 de abril 2016, 00:36

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El Carmín de La Pola, una de las fiestas que más gente reúne en la localidad, corre peligro de no celebrarse este verano, advirtió ayer la Sociedad de Festejos, encargada de su organización. El motivo, que aún no ha recibido la subvención -unos 40.000 euros- que debe pagarle el Ayuntamiento y desconoce cuándo va-n a poder contar con ella. El presidente de la organización, Jenaro Soto, criticó la demora en los trámites y el problema que ello supone a la hora de contratar las diferentes actividades: «He paralizado todas las contrataciones como consecuencia de esto», afirmó. Un problema que también está afectado a otras asociaciones de la zona.

Soto, quien volvió a la presidencia hace cuatro años tras formar parte de ella en varias etapas, reconoce que desde entonces nunca había existido tanta demora con los trámites. «No sólo estamos tardando en recibirla, sino en saber cuándo nos la van a dar», explicó. El año pasado, la sociedad recibió el ingreso a finales de marzo, en concreto el día 20: «Para Güevos Pintos ya solíamos tenerla». Una tardanza en el cobro de la subvención retrasa también la organización del evento, que este año, si todo se soluciona, se celebrará del 14 al 19 de julio.

La explicación que la sociedad ha recibido por parte del Ayuntamiento es que la ayuda «se estaba gestionando en Intervención», pero que seguía los mismos pasos y trámites que cualquier otra. «Nosotros no somos los únicos afectados, el resto de sociedades que tienen un convenio están igual», dijo Soto. Un ejemplo es la Asociación Amigos del Roble.

La demora en el pago de la ayuda no es el único problema. La sociedad arrastra desde hace varios años una deuda que llegó a alcanzar los 52.000 euros. Soto explicó el año pasado, en una entrevista a EL COMERCIO, que se debía a «la cantidad y calidad» del programa en aquellos años. «Generaron unos sobrecostes que creíamos que íbamos a cubrir y que no fue posible», explicó. En los últimos meses, se ha conseguido reducir está cantidad en unos 32.000 euros. A pesar de este problema, el presidente se ve confiado y espera que al final todo tenga arreglo.

Una ludoteca

Si finalmente la subvención llega a tiempo, El Carmín de este año volverá a ser una cita ineludible para los amantes de las romerías y las fiestas. Además, como novedad, Soto anunció ayer que están valorando la idea de instalar una ludoteca en el prao para que los más pequeños puedan disfrutar de la fiesta en una zona vigilada y controlada.

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