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«Hay que aplicar la ley a Leo Messi y evitar la sensación de impunidad»

«Hay que aplicar la ley a Leo Messi y evitar la sensación de impunidad»

El seminario de La Granda sobre la reforma fiscal concluye analizando el fraude y los cambios en el Impuesto de Sociedades

FERNANDO DEL BUSTO

Jueves, 31 de julio 2014, 00:19

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La reflexión sobre el fraude fiscal, la lucha contra el mismo y la propia responsabilidad del Estado centraron ayer buena parte de los debates en la última jornada del curso de La Granda dedicado a analizar la reforma fiscal, y donde también se habló del nuevo Impuesto de Sociedades. José Andrés Sánchez Pedroche, rector de la Universidad a Distancia de Madrid (UDIMA), abrió las ponencias poniendo el acento en la inseguridad jurídica que existe en el ordenamiento y que puede provocar el fraude.

«En cierta manera, esa inseguridad es inevitable, pero en la parcela tributaria quizá es mayor porque las normas no se redactan de manera muy clara. Incluso se ha llegado a hablar de ambigüedad calculada. Todo eso tiene muchas implicaciones emocionales, jurídicas y económicas, porque al Estado le cuestan mucho dinero, incluso en los casos favorables para la administración», apuntó.

Es un problema, comentó, que afecta a todos los países, si bien en algunos casos se han dotado de mecanismos jurídicos que facilitan los acuerdos entre las partes, donde citó el caso de Alemania. «El gran factor es la inestabilidad tributaria. Se redacta la ley y, a los meses, hay cambios. Valdría la pena ser más sencillos en la redacción de las normas y que tuviesen una duración mayor. Tendría un factor pedagógico», apuntó.

José Andrés Sánchez aludió a los elementos de cambio que se introducen en el sistema, como la Ley de Derechos y Garantías del Contribuyente que crea el concepto de presunción de buena fe del contribuyente, habida cuenta que las personas no siempre disponen de los conceptos necesarios para asumir la tramitación de los impuestos. «Los tribunales van en esa dirección, sobre todo en la imposición de sanciones. Lo aplican en mayor medida que las administraciones tributarias. En esa supuesta mala fe, en muchas ocasiones se produce un abuso de las administraciones tributarias, porque se trata de conceptos complejos», aseguró.

Y aunque un contribuyente medio no debe tener problemas en sus relaciones con la administración tributaria, Pedroche aconsejó ser «prudentes» y, si fuese necesario, acudir a algún asesor fiscal para resolver las dudas que pudieran existir.

Por su parte, el que fuera director de la Agencia Tributaria y actual socio de Garrigues, Abelardo Delgado Pacheco, también abordó la situación del fraude fiscal, «donde la situación de España es ligeramente mayor a los países de nuestro entorno, aunque es muy difícil dar cifras. Siempre hay que luchar contra el fraude». Es una situación que se mantiene estable en el tiempo y donde sólo unos pocos países, como Austria, ofrecen un comportamiento ejemplar.

Para lograr la reducción del fraude, Delgado considera necesaria la combinación de diferentes medidas: «Es un tema de conciencia social, eficacia de la administración tributaria, tal vez de cambio de la estructura económica del país. Hay que hacer todo el mismo tiempo», explicó.

Entre las herramientas se cita el aumento de medios personales en la Agencia Tributaria, una reivindicación sobre la que opinó. «Es cierto que debería crecer, tampoco mucho más. En los últimos años se ha asistido a una congelación de plantillas y no debería verse afectada por ellas y poder recibir gente joven», comentó.

¿Qué hacer, entonces, ante casos como el de Leo Messi u otros escándalos como el de Jordi Pujol o Iñaki Urdangarin, donde muchas personas pueden creer que resultarán impunes? ¿Se debe actuar con ejemplaridad? «No cabe duda de que el fraude fiscal es un delito. En estas cuestiones no es muy recomendable hablar de ejemplaridad. Lo que se debe hacer es aplicar la ley y evitar cualquier sensación de impunidad», respondió. En su opinión la reforma fiscal, no tiene como principal objetivo luchar contra el fraude, sino «revitalizar la economía, crear empleo y adaptarse a la evolución económica».

Impuesto de Sociedades

Pero ayer no sólo se habló de fraude fiscal. Los abogados Ignacio Guerra García, socio de Garrigues, y Cristino Fayos Cobos, socio de Deloitte, abordaron lo que implica el nuevo Impuesto de Sociedades que deberá aprobarse en el Consejo de Ministro que se celebrará mañana viernes, 1 de agosto. «Sustancialmente no cambiará conceptos y la base imponible se hará a partir del resultado contable. Se podría haber modificado el texto vigente, pero se optó por una nueva ley. Entre sus virtudes está la simplificación del sistema fiscal y adecuarse al derecho comunitario», explicó Cristino Fayos.

Ignacio García destacó que los cambios que se plantean «evitan distorsiones que actualmente se producen», al tiempo que destacó que «contiene elementos nuevos que pueden ser positivos para las pymes, como la reserva de nivelación, o cambios que se introducen después de la advertencia de la UE por las discriminaciones que existían entre residentes y no residentes».

García comentó pequeños cambios, como una nueva definición del concepto de actividad económica o las novedades en la fiscalización del arrendamiento de inmuebles. «No afectará mucho a las grandes cifras de la economía nacional, pero la situación anterior generaba constantes controversias en los tribunales que ahora desaparecerán», avanzó.

La fiscalidad de las empresas avanza en nuevos retos producidos por una economía cada vez más globalizada. Cristino Fayos recordó cómo la Comisión Europea trabaja en una directiva que permita reducir la competencia fiscal entre los países de la Unión. Ignacio García aludió a los esfuerzos de la OCDE para armonizar entre los países la fiscalidad de los beneficios entre Estados y luchar contra la evasión fiscal.

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