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Se armó el Belén en Llano Ponte

Se armó el Belén en Llano Ponte

Doce composiciones forman la tradicional exposición de Nacimientos

J. F. GALÁN

Domingo, 21 de diciembre 2014, 01:22

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Clásicos, vanguardistas, de play-mobil... Son diez más dos composiciones colectivas, y pueden visitarse en un bajo sito en Llano Ponte 6, a la altura de la pasarela de acceso al Niemeyer, el mismo que ya el año pasado acogió la Exposición Colectiva de Belenes, que hasta entonces albergaba la iglesia vieja de Sabugo. El horario, de 11 a 14 y de 17 a 21.30 horas, con la salvedad de que los días de Nochebuena y Nochevieja cerrará a las ocho y de que el 1 de enero solo abrirá en horario vespertino.

La disposición ha cambiado. Si la pasada Navidad el recorrido era circular ahora los belenes se sitúan a lo largo de tres paredes, consiguiendo mayor sensación de espacio. El primero que se encuentra está firmado por los alumnos más pequeños de la Escuela de Cerámica. Se titula 'Belén Soñado', de clara inspiración infantil. Luego está el de play-mobil, de ambiente polar. Rebosa imaginación, y huelga decir que es el preferido de lo niños. Lo firma Jorge Calzón, todo un fan del universo play mobil.

El tercero, 'Regreso al futuro', obra de la imaginación de la familia De Diego, tampoco deja indiferente. Combina elementos tradicionales con otros que recuerdan a la trilogía cinematográfica de ciencia ficción que tanto éxito alcanzó a mediados de los 80. No falta el coche, casi todo se mueve y la iluminación es cambiante, del día a la noche.

Luego está una composición formada por distintos belenes de cumbres y a continuación se encuentra la particular visión de los Reyes Magos de los alumnos del Instituto Menéndez Pidal, inspirada en el escultor y pintor suizo Alberto Giacometti. Los reyes marchan a pie, bien separados entre sí, y destacan sobre un fondo que evoca al arte óptico de la década de los setenta. Son los únicos elementos de la composición, la de mayores dimensiones.

'Lugares del mundo' está formada por miniaturas, algunas tan pequeñas que se han creado, materialmente, sobre la cabeza de una cerilla o en el interior de una cáscara de nuez. A partir de ese punto predomina lo tradicional, marinado con los matices y la importa de cada belenista. 'En aquellos tiempos', de Celso Fernández, evoca a los pueblos típicos del África presahariana, con sus edificios de adobe. Destaca el color arena, las grandes proporciones de los elementos y el realismo.

En la 'La Caleya', de Teófilo García, profesor del Menéndez Pidal, el toque es asturiano. Lo delata el carro del país, la serraría y el agua corriente, todo perfectamente integrado en la estampa de un Belén clásico. La familia Bango ha apostado por recoger el momento de la llegada de los Magos de Oriente, aunque el elemento central es un gran rebaño de ovejas con su pastor. El misterio se encuentra en un segundo plano, y el conjunto se envuelve en una escenario rocoso, muy logrado.

Del siguiente, 'Entre Ruinas', llama la atención el tamaño de las figuras, la profundidad y sobremanera la Virgen María, sedente con el niño al cuello y su realismo. Su autor es Manuel Solís, que también firma 'La llegada de Los Reyes Magos', con centenarias figuras talladas en Olot (Girona). Hay dos reyes a caballo y uno, Baltasar, en camello, y aunque el Misterio no aparece, se intuye perfectamente al fondo. Lo anuncia el arcángel San Gabriel.

El último es el municipal. En realidad no es Belén, es el Avilés medieval. La grandiosa muralla, con su barbacana y el Misterio a su pies, el río Tuluergo, las casas antiguas... Recrea la actual intersección de Cabruñana y San Bernardo con La Cámara tal y como su autor, Pepe Espiña, se imagina que era mil y pico años después del nacimiento de Jesús, en Belén.

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