«Quizás seamos el concejo con mayor participación ciudadana»

El socialista Miguel Ángel García Balbuena es el concejal responsable del desarrollo del sistema de Participación Ciudadana desarrollado en los últimos años en la ciudad, un sistema que sigue sin librarse de duras críticas por parte de determinados sectores. Dentro de ese marco crítico, el Grupu d'Ornitoloxía Mavea anunció esta semana la decisión de impugnar la constitución, en noviembre, del Consejo de Ciudad, al entender que no cumple con lo previsto en el reglamento vigente.

¿Qué tiene que decir a esa impugnación?

Pues parece que hay determinadas entidades que consideran que el Consejo de Ciudad no se constituyó de acuerdo con el reglamento. Pero lo cierto es que el resto de entidades creen que es acorde con la realidad. La impugnación va asociada a la petición de que se constituyan nuevos consejos sectoriales, y eso es algo en lo que todo el mundo está de acuerdo. Pero el primer Consejo de Ciudad se constituyó con un número elevado de entidades presentes el 26 de noviembre de 2013, con la idea de que tenemos un reglamento de participación que hay que desarrollar y en ese marco pueden tener cabida esas nuevas áreas. Lo cierto es que el Consejo de Ciudad está constituido y que incluso hay nuevas entidades, como la UCAYC, que han pedido entrar en él, y eso es bueno.

De todos modos, parece lógico que quienes están en el Consejo de Ciudad no vean la necesidad de impugnarlo.

Sí, pero es que creemos que en el consejo se recoge el espíritu del reglamento.

Recoger el espíritu no es lo mismo que seguir estrictamente el reglamento.

De todo se pueden hacer interpretaciones. Hemos considerado que lo que pone es que deben estar los consejos sectoriales, que son nueve y no cuatro. Entendemos que no se puede quitar a unos por otros. En ese sentido, no nos preocupa la impugnación.

Parece que el sistema de Participación Ciudadana no se libra de las críticas. Una de ellas es que no se acaba de desarrollar lo que dice el reglamento.

Es que es muy amplio, no son sólo dos o tres normas. Cada consejo ha de desarrollar su reglamento, algo que lleva más de un año, porque hay que pedir informes y siempre quedan cosas por desarrollar. Es un trabajo muy complejo y con mucha tramitación. Casi todo tiene que pasar por el Pleno.

Otra crítica es la de que existe la tentación de utilizarlo para 'controlar' al movimiento asociativo.

Estamos hablando de que, entre los nueve consejos, están representando a distintos colectivos más de quinientas personas. Hacer esa lectura es ser muy corto de miras. Están representadas el noventa por ciento de las entidades que trabajan en la ciudad y el sistema permite la participación de personas a título particular. En el consejo de infancia, por ejemplo, que se celebró estos días, había 122 personas.

¿Cuál prevé que será el desarrollo del sistema en los próximos años?

Estamos al final del mandato, así que no podemos saber cuáles serán las prioridades. El Consejo de Ciudad se ha constituido y la primera reunión ha servido para la presentación por parte de la alcaldesa del pacto Avilés Acuerda y para expresar el apoyo a los problemas de Alcoa. Es de esperar que a principios del mandato el Consejo de Ciudad aborde las grandes medidas que el municipio tiene que fortalecer, pero será la próxima Corporación la que deberá tomar las decisiones correspondientes.

¿Qué es lo mejor del sistema de participación avilesino y qué se podría mejorar?

Creo que hay consejos que ya llevan muchos años y que, tal vez, deban adaptarse. Los hay concretos, como los relacionados con la erradicación del chabolismo, la salud o la juventud, que en determinados momentos tenían una capacidad muy grande de actuación y que ahora no están adaptados a las dinámicas de la ciudad. En otros, como los de educación o eliminación de barreras, creo que se adaptan más a la realidad y tienen mayor fluidez de trabajo.

¿Qué balance hace de los años que lleva en funcionamiento el sistema en la ciudad?

El balance es muy positivo. Hay mucha gente participando, muchas propuestas, mucha actividad... En principio, las peticiones se ceñían más a cuestiones urbanísticas y ahora se circunscriben más al ámbito social. Estamos quizás en el municipio que más trabaja la participación ciudadana en Asturias, y hay que reconocer el trabajo realizado para ello por los ciudadanos y las asociaciones.