El desembarco de inversores asturchilenos en Avilés continúa con otra rehabilitación

El capital hispanoamericano ha vuelto a cerrar una operación inmobiliaria en la ciudad al adquirir íntegramente el edificio situado en el número 10 de la calle de Rui Pérez. La operación se firmó ayer en una notaría avilesina y permite que Inversiones Trespalacios Sánchez se haga con toda la propiedad del inmueble. En total, la operación supone una inversión de dos millones de euros, incluyendo los costes de compra del edificio y su rehabilitación. Esta respetará las características arquitectónicas que, al estar protegido, obligará a un largo proceso administrativo.

El bajo del inmueble se encuentra ocupado en la actualidad por la taberna Pecaditos, que mantendrá su actividad. La mayor transformación se producirá en el resto del edificio, que se rehabilitará para su uso residencial y como despachos de oficinas.

En la actualidad, sólo cuenta con una persona viviendo pero ya existe un compromiso para su mudanza, según explicaron fuentes de la operación que ha contado con la asesoría inmobiliaria de Josefina de La Vega.

En la operación ha sido determinante la situación del edificio, en una de las entradas de la plaza de abastos y con un negocio en su bajo. La inversión se ha negociado en los últimos seis meses. El desbloqueo de la situación política española ha contribuido a cerrarla, toda vez que se despejan incertidumbres que despiertan recelos a las personas que toman la última decisión a miles de kilómetros. De hecho, las personas que intervinieron en las negociaciones aventuraron que antes de fin de año se pueden cerrar otras inversiones similares en la ciudad.

Esta operación es la carta de presentación en la ciudad de Inversiones Trespalacios Sánchez, la sociedad con la que tres empresas chilenas canalizan sus operaciones en España. En concreto, el accionariado se reparte entre Inversiones Cares Limitada, Inversiones Tres Pinos Limitada e Inversiones El Barrio de Aca Limitada. Su actividad en Chile se centra en la hotelería y actividad inmobilaria, junto con alguna presencia en el sector vinícola.

Sus propietarios y gestores son asturianos, oriundos de Llonín, en Peñamellera Alta. En concreto, se trata de los hermanos Claudio y José Ramón Trespalacios Cueto y su cuñado Cándido Sánchez Menéndez.

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