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Unos ochenta trabajadores estrenaron ayer las nuevas dependencias, en el Parque Empresarial Principado de Asturias, a unos 500 metros del edificio principal
CSC prevé ampliar su plantilla en al menos ochenta personas en 2017

CSC prevé ampliar su plantilla en al menos ochenta personas en 2017

Amplía sus instalaciones a un segundo edificio en el PEPA y anuncia que trabaja en nuevos contratos para el próximo año

J. F. GALÁN

Martes, 20 de diciembre 2016, 06:57

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CSC redobla su apuesta por Avilés. La multinacional estadounidense, líder mundial en el sector de la gestión de servicios de tecnologías de la información, ha contratado a lo largo del año que termina a unas ochenta personas y tiene previsto incorporar al menos otras tantas en 2017, un paso más en la vertiginosa expansión que experimenta desde que, en 2003, inició su andadura en la comarca como centro CSC propiamente dicho. Sus orígenes se sitúan en otra multinacional estadounidense asentada en Tamón, Dupont, para la que ya trabajaba, incrustada en sus instalaciones, desde mediados de los años noventa.

De las treinta personas que entonces formaban la plantilla se ha pasado a las 883 actuales, más de novecientas incluyendo a becarios y subcontratados. Son de 32 nacionalidades diferentes con la juventud y el multilingüismo como denominador común. La media de edad es de 34 años y se trabaja en nueve idiomas diferentes, si bien el 60% del personal es asturiano.

CSC Avilés se consolida así como una de las empresas más importantes de la comarca, la segunda, tras ArcelorMittal, por número de empleados, y también como uno de los principales centros a nivel mundial de Computer Sciences Corporation, con sede en Virginia y presencia en más de sesenta países, 66.000 empleados y una cartera de 2.500 clientes, tanto empresas privadas como organismos públicos.

De ellos 64 se atienden directamente desde el centro de Avilés, que orienta el 85% de sus esfuerzos al mercado exterior, tanto a Europa como a otros continentes. El abanico es tan extenso como variado, desde bancos o aseguradoras hasta empresas de automoción, aeroespaciales, de telecomunicaciones, químicas, energéticas, del sector sanitario o administraciones públicas. En este caso, CSC ha desarrollado una aplicación en ambiente Java que evalúa el desempeño profesional de los funcionarios del Principado y que en función de los resultados propone cambios en la política de recursos humanos.

El nuevo salto hacia adelante ha requerido una segunda sede, un edificio de cuatro plantas hasta ahora desierto que, al igual que el principal, se ubica en el Parque Empresarial Principado de Asturias, a unos 500 metros el uno del otro. CSC ocupa en régimen de alquiler la totalidad de la segunda planta y la mitad de la tercera, unos 1.400 metros cuadrados que según el director, el avilesino Igor Botamino, «van a permitir un crecimiento inminente». Sobre la mesa ya hay dos nuevos proyectos para clientes de Alemania y Francia, «uno en el ámbito de las infraestructuras informáticas y otro en el de las aplicaciones».

Botamino va un paso más allá. «Este centro de servicios es uno de los pocos de la compañía a nivel mundial capacitado para entregar servicios end-to-end -integrales-. Estamos en condiciones de cubrir todas las necesidades de tecnologías de la información de cualquier compañía, desde las infraestructuras hasta las aplicaciones, bajo el concierto de una capa de gestión de servicio estándar», por lo que no descarta que en el medio o incluso en el corto plazo CSC Avilés ocupe el resto del edificio. Las expectativas apuntan a que ya en 2017 entre fijos, subcontratados y becarios se supere la barrera de los mil empleados.

Dos perfiles

Las contrataciones previstas a lo largo de 2017 encajan en dos perfiles bien diferenciados y definidos, uno de corte eminentemente técnico, como ingenieros, físicos o matemáticos, y otro orientado a relaciones externas y con el cliente, desde titulados en Turismo o Filología hasta no titulados. Eso sí, en ambos casos se requiere inglés y al menos otro idioma comunitario al margen del español. Si son más, mejor.

La formación corre a cargo de CSC y también de la Universidad de Oviedo. La empresa y la institución estudiantil mantienen un convenio que ha permitido que 200 jóvenes licenciados o diplomados terminasen fijos en CSC después de completar una etapa como becarios.

«Aquí se ofrece la posibilidad de desarrollar una carrera internacional sin salir de Asturias, flexibilidad de horarios, trabajar en las últimas tecnologías con equipos de gente de países y culturas diferentes y desarrollar una carrera profesional que se abre a medida que la empresa se expande. Esas son las cosas que hacen atractivo trabajar en CSC», concluye Igor Botamino.

El salto a las nuevas dependencias no ha sido un proceso sencillo. La sede se había quedado pequeña, hasta el punto de que la empresa tuvo que recurrir a 'sillas calientes', es decir, más de un empleado por puesto de trabajo, por turnos, y a fomentar el teletrabajo.

La falta de espacio coartaba sus expectativas de expansión y la compañía trasladó a la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepides), órgano gestor del Parque Empresarial dependiente del Ministerio de Hacienda y Función Pública, su necesidad de ampliar instalaciones.

Sepides le ofreció entonces la posibilidad de alquilarle uno de los dos edificios del parque popularmente conocidos como 'los gemelos', construidos en 2009 tras una inversión de cuatro millones y medio de euros y con 5.600 metros cuadrados de superficie útil de los cuales sólo estaban ocupados 600. El único inquilino era Software A. G., instalado en el otro edificio 'gemelo'.

Además de la amplitud espacial, la disposición interior se amoldaba a los requerimientos, prácticamente una única gran estancia por planta, diáfana, por lo que la multinacional dio su conformidad. El problema surgió al comprobar que el paso del tiempo y las carencias de mantenimiento habían hecho mella en la cubierta, con filtraciones y humedades, y en el sistema de aire acondicionado, inutilizable.

Sepides se comprometió entonces a realizar las obras necesarias, pero el tiempo fue pasando y todo seguía igual. Ante tal tesitura, CSC llegó a plantearse la posibilidad de mudarse, y ofertas no le faltaron. Municipios como Pravia, Llanera o San Martín del Rey Aurelio se pusieron en contacto con la empresa con el fin de atraerla a su terreno.

Las obras de adecuación se licitaron finalmente a mediados del pasado mes de mayo en 622.000 euros y, aunque con retraso, CSC ha podido ocupar sus nuevas dependencias. Ayer las estrenaron ochenta trabajadores.

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