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Los ladrones rompieron el cristal con la base de una sombrilla.
Roban la recaudación del bar La Patata de Versalles

Roban la recaudación del bar La Patata de Versalles

Los ladrones intentaron entrar también en el café Lagos de Los Campos pero lograron su objetivo debido al blindaje de las lunas del establecimiento

SHEYLA GONZÁLEZ

Sábado, 24 de diciembre 2016, 04:58

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Los robos en establecimientos hosteleros continúan levantando dolor es de cabeza al sector. En la madrugada de ayer los ladrones consiguieron ejecutar un nuevo robo, mientras que otro se vio frustrado. El primero de ellos tuvo lugar en el barrio de Versalles, en el bar La Patata, ubicado en la calle Reconquista, mientras que el segundo ocurrió en Los Campos.

La propietaria de La Patata descubrió los destrozos a primera hora de la mañana cuando acudió al local para abrirlo al público. Su sorpresa fue encontrarse allí a la Policía Nacional. «Entraron directos a por la máquina registradora para llevarse la recaudación, y también robaron una pequeña hucha que tenía aquí mi nieta y la máquina de detectar billetes falsos», relató ayer Esther Delgado.

Los cacos utilizaron la base de piedra de una sombrilla para romper el cristal y poder acceder al interior a través de la ventana. «Tenía que ser una persona fuerte porque del golpe no solo se rompió la luna, sino que se partió en dos la piedra», explicó la dueña. Es la primera vez que les roban desde que ellos regentan el negocio aunque los anteriores gestores sí habían sufrido este tipo de incidentes. «Ahora nos queda ver si la Policía puede saber quién fue, aunque por lo que nos han dicho van con guantes para que no se les pueda identificar», apuntó Delgado.

Anoche, los ladrones actuaron también en Corvera, en concreto en el café Lagos de Los Campos. Allí también intentaron romper las lunas, pero no lo consiguieron al ser estas blindadas y desistieron en su intento. «Tenemos el audio en las cámaras y sabemos que lo intentaron durante varios minutos pero no lo lograron», relató. Utilizaron una alcantarilla para romper el cristal y «al ver que solo estallaba se marcharon», explicó Covadonga Fernández, propietaria del café. La duda que les queda ahora es que los cacos intenten volver a terminar el trabajo empezado. «Queremos cambiar hoy la luna porque tenemos miedo de que vuelvan esta noche», comentó ayer Fernández.

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