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J. F. G.
Lunes, 8 de mayo 2017, 01:50
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Con unos dos kilómetros de longitud, la senda peatonal del río Magdalena se inauguró a finales de 2014 tras una inversión de 551.537 euros a cargo de Confederación Hidrográfica del Cantábrico a los que posteriormente se sumaron otros 46.900 que el Ayuntamiento desembolsó para dotarla de bancos, papeleras y alumbrado público. Parte de la zona de Fuentesantos en dirección a Villa, llega hasta el límite de los concejos de Avilés y Corvera y no tardó mucho tiempo en ganarse el favor de quienes la utilizan para pasear o para hacer deporte.
A día de hoy hay un obstáculo que aunque no resulta del todo insalvable, sí dificulta el tránsito, sobre todo a personas mayores o con problemas físicos. Es un árbol, un aliso de considerable envergadura que al caer partió una de las pasarelas de madera que salvan el cauce, y lleva así desde el 2 de febrero. Los habituales de la senda advierten también de que en el inicio de la senda otro árbol amenaza con venirse abajo y llevarse por delante el tramo de tendido eléctrico que pasa justo bajo sus ramas.
El Ayuntamiento de Avilés, titular de la senda desde que en el 27 de julio de 2015 el Pleno aceptó su cesión, ha adjudicado a la empresa Rierastur S. L. la retirada del árbol y la reposición de la pasarela dañada. El plazo de ejecución de las obras es de un mes.
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