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Niños a la entrada del colegio. MARIETA
Los problemas entre profesores y alumnos se reducen en un 30%

Los problemas entre profesores y alumnos se reducen en un 30%

Los coordinadores del programa de tutoría entre iguales en primaria y secundaria que lo aplican lo valoran «muy positivamente»

C. DEL RÍO

AVILÉS.

Viernes, 15 de junio 2018, 03:16

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Reducir el número de incidencias entre profesor y alumno no es propiamente uno de los objetivos del programa Tutoría entre Iguales (TEI), en el alumnos mayores guían a otros más pequeños, pero es uno de los escasos números que manejan en los centros sin antecedentes de acoso escolar y que ilustran el éxito de una iniciativa que en este curso escolar se ha implantado en doce colegios de primaria y dos institutos, La Magdalena y el Carreño Miranda. Oswaldo López y Juan Luis Díaz, director y coordinador del TEI en el instituto de La Magdalena, respectivamente, señalaron que «el porcentaje de incidencias, es decir, cada vez que un profesor apunta algo ocurrido con un alumno, se ha reducido un 30%», un descenso que si bien no pueden atribuir totalmente al TEI, sí lo consideran consecuencia directa del mismo.

López y Díaz participaron ayer en la reunión convocada por el servicio municipal de Educación en el Edificio Fuero para evaluar los resultados del TEI en este primer año de funcionamiento en Avilés. «Desde luego, ha sido muy positiva», resumieron los responsables de un centro que incorporó el programa de Bellido como complemento al propio de mediación que ya tenían en marcha.

«Lo veíamos más completo y global. Con el TEI lograbas implicar a todo el centro y no solo a los diez alumnos que hasta entonces venían actuando como mediadores. Ahora lo son todos». Ese 'ahora' se refiere al próximo curso, el 2018/2019, cuando los alumnos de tercero de secundaria actuarán como tutores de los nuevos, los de primero. Los que este curso han estrenado el programa estarán en cuarto y segundo, respectivamente, con la filosofía asimilada. Porque, ante todo, la Tutoría entre Iguales «implica un cambio cultural y un compromiso ético del alumnado», que se consigue con numerosas tutorías y jornadas de convivencia, señaló Juan Luis Díaz.

Si hubiera que poner un 'pero' al desarrollo del programa serían los tiempos. Este curso la tutoría comenzó en enero por la formación previa exigida al profesorado, que se llevó a cabo durante el primer trimestre en el CPR. Después, «realizamos un trabajo exprés para unir a tutores y tutorizados y las incompatibilidades en algunas parejas las arreglamos sobre la marcha», confesó López, que está convencido de que el próximo curso, una vez controlada la mecánica, todo irá sobre ruedas y estará más cerca el objetivo de convertir a Avilés en una «ciudad TEI».

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