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La concejala de Cultura del Ayuntamiento de Gijón, Ana Montserrat López, la directora de Feten, Marián Osácar y varios miembros del equipo que cada año organiza la feria, Humberto Fernández, Clara Vigil, Javier Rodríguez, Raquel Huergo y Julián Jiménez.
Los Max reconocen la labor de Feten

Los Max reconocen la labor de Feten

Los más prestigiosos premios de teatro del país distinguen la importante contribución de la feria de artes escénicas para niños de Gijón

MIGUEL ROJO

Jueves, 7 de abril 2016, 00:46

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«Este es el mayor galardón al que podríamos optar, y lo hemos conseguido». Así de feliz se mostraba ayer Marián Osácar, directora de Feten, la Feria Europea de las Artes Escénicas para Niños y Niñas que, desde hace 25 años, reúne en Gijón a lo más granado del sector, con una participación creciente y un prestigio al alza que ahora obtiene recompensa, y de las gordas: nada más y nada menos que el Premio Max por la Contribución a las Artes Escénicas 2016. A su lado, en el palmarés de este año, estará Lola Herrera, reconocida con el Premio de Honor, las compañías que se hagan con los premios a los mejores espectáculos y los intérpretes que destaquen entre sus compañeros. Será el 25 de abril cuando la propia Osácar se desplace a Madrid para recoger el reconocimiento en la gala que se celebrará en el Teatro Circo Price.

«Es la primera feria de teatro que recibe este galardón, así que estamos muy orgullosos y queremos hacer extensivo el premio a la ciudad de Gijón, que lleva 25 años apostando por esta iniciativa, a las compañías, a los programadores y también a los medios que nos ayudáis, porque Feten se hace entre todos, y este es un premio para todos, especialmente para el público», explicaba Marián Osácar. Será en esta edición de los Max, la número diecinueve, cuando se reconozca esa labor que reúne en Gijón cada año a miles de personas en torno a los espectáculos que acuden de todo el mundo -lo de feria europea ya se les ha quedado pequeño y no les quedará otra que cambiarse el nombre- a competir entre ellos con las últimas novedades destinadas al público infantil y juvenil, pero también a mostrarse en acción ante los ojos de los principales programadores del país, que visitan Feten para incluir en sus agendas esos montajes que después triunfarán por teatros, ferias y plazas. «El mercado nacional está establecido; ya hay compra y venta. Pero lo que pretendemos es salir, y que vengan muchos programadores internacionales para abrir fronteras a todas nuestras compañías», comentaba en ese sentido la directora de la feria, que cifra la presencia de compañias extranjeras en «un 10 o 13% del total».

El comité que concede la distinción explicaba ayer que se lo daba a Feten «por consolidarse como referente internacional de artes escénicas dirigidas al público familiar y por respetar, apoyar, elevar y dignificar los espectáculos para la infancia. Porque está demostrado que acercarse al hecho escénico en edades tempranas ayuda a amarlo y, en ese sentido, Feten lleva a cabo una encomiable labor de creación de públicos». Casi nada.

«Es cierto que los espectáculos para niños y niñas tienen el mismo rigor, desde sus producciones, hasta sus elencos y sus puestas en escena, que el teatro de adultos. Es más; pienso que tienen mayor riesgo creativo, porque esa es su única carta de presentación. Aquí no existe un cabeza de cartel; lo que cuenta es su creatividad, su punto y su manera de presentarse a un espectador del presente, no del futuro», reconoce Osácar.

Desde su primera edición, en 1991, Feten complementa la exhibición y mercado de espectáculos con la programación de actividades paralelas: foros y conferencias, presentaciones de libros, exposiciones y otros elementos de agitación intelectual, convirtiéndose en marco de debate referencial para el sector.

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