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ALBERTO PIQUERO
AVILÉS.
Sábado, 12 de mayo 2018, 00:16
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Hace sólo dos semanas que Alfredo Sanzol (Madrid, 1972) deleitaba a los públicos del Jovellanos y el Centro Niemeyer con 'La ternura (Una comedia de leñadores y princesas)'. Ayer, en el Teatro Palacio Valdés, ha vuelto a convocar el beneplácito de los espectadores tras presentar 'La valentía'. Según parece, 'La valentía' tuvo su origen en un taller teatral, donde los propios actores establecieron un ideario a partir del cual se tejió la escritura del autor, asimismo director. El resultado contemplado en el Palacio Valdés es una magnífica comedia de enredo para la que se puede augurar un éxito seguro en la trayectoria que ayer comenzó en Avilés.
La historia configuró a dos hermanas, Guada y Trini, quienes heredan una casa en la que han pasado antiguos veranos; pero que plantea un problema: una autopista transcurre por las inmediaciones de la edificación, transformando la vivienda en un sinvivir. No obstante, Guada opta por acogerse allí durante el invierno. Pésima opción desde el punto de vista de Trini. Al conflicto se suman otras dos parejas de hermanos, una de ellas experta en expulsar a la gente de donde no quieres irse, y la segunda, la más singular, unos inquilinos venidos del más allá para alquilar una habitación de la casa.
Un esquema que suscitó muchas risas en la platea, con los personajes perdidos en malicias y malentendidos, sobre el cual se edificó una propuesta más honda, preguntándose por la verdadera silueta del valor, de los miedos, de la convivencia interpersonal y también de la del conjunto de la sociedad. Un ejercicio brillante en el que se entrelazaron lo divertido y lo serio. Además de un diálogo entre fantasmas y seres reales, aunque no quede demasiado marcada la diferencia entre unos y otros. Y por otro lado, una controversia respecto de las lealtades debidas a nuestros antepasados sin abdicar del compromiso necesario con el presente.
El cuadro actoral respondió a esa misma brillantez, no en vano se implicó en la propia construcción de la obra. Sobresalientes los seis, Jesús Barranco, Francesco Carril, Inma Cuevas, Estefanía de los Santos, Font García y Natalia Huarte.
La concurrencia repitió la calurosa ovación que dispensó a 'La ternura' hace dos semanas -también 'La valentía' desprende grandes dosis de ternurar-. Sanzol ya debe ser medio asturiano.
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