Borrar
La fotografía muestra uno de los paneles que presentan los trabajos del Instituto Alemán. Se exponen también fotografías antiguas.
Una mirada sobre el  Instituto Alemán

Una mirada sobre el Instituto Alemán

Tito Bustillo acoge la exposición 'Blick/Mira!' que recopila la historia de la institución arqueológica

M. F. A.

Domingo, 12 de julio 2015, 00:34

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

En plena postguerra española, Helmut Schlunk, un joven arqueólogo alemán, puso en marcha en Madrid una institución dedicada a excavar y escarbar en el pasado. El Instituto Arqueológico Alemán en Madrid se fundó en el año 1943 -aunque oficialmente fue en 1954- y hoy atesora importantes fondos fotográficos, una prestigiosa biblioteca y mantiene sus proyectos de excavaciones. La Asociación de Profesionales Independientes de la Arqueología de Asturias (APIAA) ya reconoció su tarea con unas jornadas celebradas en Oviedo y ahora vuelve a colaborar con la institución, dependiente del Ministerio de Exteriores de Alemania, para presentar su trabajo en una exposición en el Centro de Arte Rupestre Tito Bustillo de Ribadesella.

La relación del Instituto con Asturias no es nueva. Estuvo muy vinculada al prerrománico asturiano, puesto que Helmut Schlunk mantuvo estrecho contacto con investigadores como Luis Menéndez-Pidal y Magín Berenguer.

Sobre ese pasado informa la exposición inaugurada el pasado jueves y que podrá visitarse hasta el 2 de noviembre. Producida por el Instituto Arqueológico Alemán de España y el Museo Arqueológico Nacional de Tarragona bajo la dirección de Dirce Marzoli y Pilar Sada, presenta un sinfín de imágenes con un gran valor histórico. Tal y como explica Juan Muñiz, de APIAA, son «particularmente interesantes las de Asturias por ser inéditas algunas de ellas». Se refiere a instantáneas de Santa María del Naranco, Peña Tú o San Miguel de Lillo, entre otras.

Es una oportunidad para conocer los lugares estudiados por los especialistas alemanes a través de las fotografías captadas por sus fotógrafos. Y es que la fototeca del Instituto, el lugar en el que se ha buceado para organizar la exposición, atesora nada menos que 134.000 imágenes entre sus fondos. Algunas de sus joyas están ahora ante la mirada pública.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios