Ramón Rodríguez: «Proyectos e ideas no faltan, pero dinero para ejecutarlas sí»

Lleva tiempo arrastrando la institución el problema presupuestario. Desde que la crisis se instaló en el país la rebaja de la aportación pública, concretamente de la Consejería de Educación y Cultura, ha sido evidente. «Estamos pensando en recurrir a mecenas y patentes, mientras hacemos milagros con lo que tenemos. Porque la realidad es que no hemos parado de organizar y desarrollar actividades culturales».

Las publicaciones, conferencias y estudios siguen adelante, ahora apoyadas por la tecnología digital, que logra un gran abaratamiento. «Pero no podemos dejar de lado el papel», dice Rodríguez, advirtiendo que otro de los problemas tiene que ver con la ley que les asiste. «Hace tiempo que hemos solicitado al parlamento que modifique la norma del Real Instituto para lograr que los miembros de número permanente pasen de los 29 actuales a los 50 que eran antes. Esa sería la manera de que contáramos en nuestras filas con especialistas de todas las materias, ya que, en estos momentos algunas están infravaloradas por falta de expertos». Objetivo: ser el órgano vivo «que siempre fuimos y el referente cultural de toda Asturias», para lo cual «no solo vamos a mirar al pasado. También hablaremos del presente».

La relección de Ramón Rodríguez no fue la única cuestión que ayer se trató en el Ridea. Al término de la votación entró en escena Xuan C. Busto Cortina, invitado del ciclo de conferencias de Filoloxía Asturiana, coordinado por Ramón d'Andrés. El tema que trató Busto Cortina, profesor de Filología de la Universidad de Oviedo, fue los 'Léxicos y diccionarios de asturiano en los siglos XVIII y XIX', una «revisión crítica de los vocabularios y diccionarios de llingua asturiana más destacables d'esti periodu».