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El Toscaf quiere ganar al Romo en el adiós de Fidalgo

El Toscaf quiere ganar al Romo en el adiós de Fidalgo

El jugador gijonés, pieza clave para Juan Muñiz, abandona el equipo avilesino para irse a Inglaterra a trabajar

SANTY MENOR

Sábado, 31 de enero 2015, 00:47

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El Toscaf Atlética recibe esta tarde, a partir de las 18 horas en La Magdalena, al Romo Indupime, en un partido que será muy especial. Por motivos laborales, el lateral gijonés Alejandro Fidalgo abandona el equipo avilesino rumbo a Brighton (Inglaterra), en busca de las oportunidades que el mercado le ha negado en España, pese a ser ingeniero técnico industrial, especializado en mecánica, y haber realizado un máster en diseño industrial.

Por tanto, será el último partido en el Toscaf de un jugador que la temporada pasada rozó el ascenso a División de Honor B con el Grupo Covadonga. «Las circunstancias son las que son y no he tenido más remedio que tomar la decisión de irme. Estaba muy a gusto en el equipo y me da pena, pero el trabajo es lo principal y no podía estar aquí más tiempo sin hacer nada más que jugar al balonmano», explica.

A Inglaterra se va sin un puesto asegurado de trabajo pero con «la intención de encontrar algo y, sobre todo, aprender inglés. Mi objetivo es volver y sacarme el título Advance, aunque no dejaré de lado el balonmano. He contactado con un equipo de allí que está presidido por un español y en principio empezaré a entrenar con el Brighton, que juega en la segunda división del balonmano inglés que, eso sí, tiene menos nivel que el español».

Con todo, el gijonés se quiere despedir con un triunfo del Toscaf Atlética y de La Magdalena. «Sería ideal. Me gustaría dejar al equipo lo más arriba posible en la tabla y con los máximos puntos posibles. Nos visita el último clasificado y de ganar cogeríamos mucha distancia y dejaríamos la permanencia prácticamente asegurada», sostiene.

El jugador del Toscaf reconoce y se congratula de la gran temporada que están realizando los de Juan Muñiz. «Cuando en verano me dijeron que iba a ser el más veterano del equipo con 26 años -ahora tiene 27- no me lo creía, pero así es. Somos un equipo muy joven, con poca experiencia porque muchos de los jugadores no habían jugado nunca en Primera, y creo que el rendimiento nos ha sorprendido a nosotros mismos».

Y es que «empezamos la Liga con un poco de miedo, incertidumbre, pero empezamos a competir bien, cogimos confianza y llegaron muchas victorias. El ambiente que se respira en el vestuario es muy bueno y esa es una de las claves principales del éxito de este equipo».

Son palabras de Fidalgo, un clásico ya pese a su edad del balonmano asturiano y al que la crisis, como a tantos estudiantes españoles, le ha obligado a probar fortuna en el extranjero.

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