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F. RODRÍGUEZ
Viernes, 19 de septiembre 2014, 00:44
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El Sporting B jugará la final de la Copa Federación tras empatar ayer a cero goles ante el Caudal de Mieres en un pésimo partido en que solo hubo un par de disparos a puerta uno en cada tiempo, y uno para cada equipo. La ventaja adquirida en Mareo en la ida es la que al final prevaleció en la eliminatoria.
La primera parte fue aburrida y sólo se contabilizó un disparo a puerta. Fue en el minuto 20, por mediación de Juan Mera, detenido sin problemas por el debutante Bussman.
Los pocos espectadores que había en las gradas del Hermanos Antuña llegaron a pitar a ambos equipos como muestra de desaprobación, ya que el espectáculo que estaban ofreciendo sobre el rectángulo de juego era verdaderamente insufrible.
La segunda mitad fue igual de mala que la primera. Más tras los numerosos cambios, que permitieron ver en acción al último fichaje del conjunto caudalista, el centrocampista Jony Lomas. Los minutos se sucedían sin acciones destacadas y hubo que esperar al último para que el guardameta visitante entrase en acción, para detener sin excesivos problemas una falta botada por Sami el debut en el Caudal del último fichaje, Lomas.
Un partido para olvidar, que confirmó a un finalista que aprovechó su exigua ventaja obtenida en el primer partido.
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