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J. L. C.
Viernes, 26 de agosto 2016, 00:37
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Saúl Craviotto, el doble medallista olímpico en piragüismo, sigue con su rueda de homenajes tras aterrizar en Asturias después de su brillante participación en los Juegos de Río.
El palista catalán, afincado en Gijón, con esposa e hija gijonesas, tuvo ayer un cariñoso acto en la Comisaría de Gijón, donde sus compañeros le hicieron el pasillo por su reciente gran éxito en Brasil. Craviotto, acompañado por el también olímpico Javier Hernanz, que también forma parte del cuerpo nacional de Policía en Gijón y que ayer fue agasajado en Arriondas por sus paisanos, agradeció emocionado el tributo con los metales logrados colgando del cuello.
El Comisario Jefe, Dámaso Colunga, le entregó una placa conmemorativa por el éxito logrado y por su entrega al deporte. «Todos empujamos desde aquí la piragua», dijo el mandatario policial. Agradecido por el reconocimiento, Saúl Craviotto entregó a sus compañeros un maillot de la selección española, con el que compitió en Río, en el que se refleja una dedicatoria hacia ellos por su apoyo.
También mostró una enorme gratitud Javier Hernanz, que se trajo un meritorio diploma olímpico tras su participación en la prueba de K-4 de los Juegos de Río.
Craviotto se desplazará este fin de semana a Lérida, donde sus paisanos le tienen preparada una gran fiesta por su hazaña deportiva.
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