«Fundavi es el perfecto ejemplo de apoyo al deporte inclusivo e igualitario»

Como deportista adaptado, Jesús practicó la esgrima y continúa entrenando al baloncesto. Con la espada llegó a ser paralímpico en Atenas 2004, además de conseguir varios títulos nacionales e internacionales, y con el baloncesto todavía forma parte de un Garmat Avilés que «si todo va bien regresará a la competición la próxima temporada. Ha venido gente nueva y los mayores les estamos preparando para la competición».

Ese es uno de los retos de Fernández, pues «los éxitos conseguidos por los deportistas de mi generación ya han pasado y nuestra labor es preparar a los jóvenes». Por ello aceptó ser presidente de Fedema. «Aunque hay mucho trabajo, estoy muy contento, porque es una forma de devolver todo lo que me ha dado el deporte. Estamos luchando por sacar más gente e involucrarnos más dentro del deporte».

Para conseguirlo, «apoyos como el de Fundavi son esenciales. Son el ejemplo perfecto del deporte inclusivo e igualitario, y lo cierto es que apoyan tanto a los deportistas de élite -yo fui becado- como a la base. No hay más que ver la fotografía de familia que se hacen cada año, con gente de todas las edades». Por esa labor, Jesús Fernández anima a las empresas «a arropar a la Fundación. No le están dando dinero a un club. Se lo están dando a cinco, a muchos deportistas avilesinos que reciben su beca y a las iniciativas que apoya Fundavi. Ojalá hubiera más 'Fundavis' en otras ciudades».

Desde su llegada a la presidencia de Fedema en mayo de 2016, el tiempo de Jesús se ha reducido enormemente, por lo que, cubiertas las labores del cargo, sólo le queda tiempo para entrenar al baloncesto «y matar el gusanillo» y para dar charlas en colegios de multideporte adaptado. «La esgrima la dejé hace cuatro años por una lesión y ahora me centro en formar a los más jóvenes. Que conozcan las oportunidades que tienen y que entren en la escuela del Cosa Nuesa si les apetece».