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Fernando Alonso saluda sonriente a su salida del hospital el 25 de febrero, tres días después del accidente.
Fernando Alonso no puede sufrir otro impacto «en menos de 21 días»
Fórmula 1

Fernando Alonso no puede sufrir otro impacto «en menos de 21 días»

El piloto no correrá el GP de Australia por miedo a una segunda conmoción

DAVID SÁNCHEZ DE CASTRO

Miércoles, 4 de marzo 2015, 00:18

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Malas noticias desde McLaren: Fernando Alonso no disputará el Gran Premio de Australia. Así lo confirmó ayer la escudería mediante un comunicado en el que afirma que, pese a que el piloto ovetense no sufre ninguna lesión importante, los médicos han recomendado que no viaje a Melbourne para la prueba inaugural del Mundial de 2015. «Habiendo pasado por una serie de exhaustivos test y escáners, algunos de ellos tan recientes como el de la tarde de ayer -por el lunes-, los doctores de Alonso le han informado que le encuentran asintomático de cualquier problema médico, que no ven evidencia de ninguna lesión y que por lo tanto le describen como completamente sano desde las perspectivas tanto neurológicas como cardiacas», dice el escrito de McLaren-Honda.

El problema aparece en el siguiente párrafo del citado comunicado: «No obstante, los doctores de Fernando le han recomendado que, tras la conmoción que tuvo en el accidente durante los test (en Montmeló) el 22 de febrero, por el momento, debería buscar limitar todo lo posible cualquier factor ambiental de riesgo que potencialmente pueda provocarle otra contusión tan pronto después de la previa, así como para minimizar los riesgos del 'síndrome del segundo impacto', como un procedimiento médico normal que se sigue con los deportistas tras una conmoción cerebral. Para limitar esos factores de riesgo, específicamente, los médicos le han advertido que no debería disputar el inminente Gran Premio de Australia, a celebrar e 13, 14 y 15 de marzo».

Dicho de otro modo: Alonso está bien, pero, para evitar más riesgos, le han pedido que no corra la primera carrera de la temporada. Su sustituto, como ya lo fue en los últimos test de Barcelona, será el probador Kevin Magnussen, que consiguió su único podio en la Fórmula-1 en el circuito de Melbourne en 2014.

En el mismo comunicado, los doctores han confirmado que Alonso se siente bien, que se considera apto para correr, y que están conformes con el hecho de que haya recomenzado su entrenamiento físico, con el objetivo de prepararse para volver al volante con vistas al GP de Malasia que se disputará el último fin de semana de marzo.

«Entiendo los consejos»

El asturiano, una vez confirmada la noticia, tuiteó con optimismo: «Será difícil no estar en Australia, pero entiendo las recomendaciones. Un segundo impacto en menos de 21 días 'NO'. #cuentaAtrásMalasia». McLaren confirmó ayer que Fernando no estará ni siquiera en el box o en el muro de la escudería en Melbourne, sino que viajará directamente a Malasia.

El 'síndrome del segundo impacto' es una de las lesiones más temidas y habituales en los deportes de contacto, como el rugby. Un deportista que sufre una contusión cerebral leve puede padecer dolores de cabeza, náuseas, una ligera amnesia o incluso una afasia, como la de hablar en otro idioma que no sea el materno. Estos síntomas -que no se dan normalmente a la vez- suelen desaparecer con el tiempo, y las pruebas pueden resultar totalmente normales.

Sin embargo, si ese mismo deportista poco tiempo después sufre otro golpe en la cabeza, aunque sea de menor intensidad que el anterior, puede acabar con una lesión cerebral irreversible e incluso fallecer. El motivo: el cerebro puede llegar a herniarse y el paciente puede morir en cuestión de minutos. El protocolo médico establece un mes de descanso y reposo absoluto para que el afectado recupere la normalidad absoluta, su cerebro se recupere del golpe de manera natural y pueda seguir llevando una vida sin problemas.

Desde hace unos años, los médicos son especialmente cuidadosos en casos de este tipo. Gasol se quedó sin jugar durante once días en 2013 por dolores de cabeza y mareos tras un codazo de McGee. Los médicos de la NBA le prohibieron jugar e incluso estímulos fuertes: ver la televisión o estar delante del ordenador. En la Nascar, Dale Earnhart Jr. sufrió un accidente que le provocó una conmoción pero siguió compitiendo. Al mes siguiente, tuvo otro accidente fortísimo y tuvo que estar bajo una vigilancia médica que le hizo perderse dos pruebas.

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