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Alonso luce un pañuelo conmemorativo de su gran premio 250.
Alonso se conforma con la fiabilidad

Alonso se conforma con la fiabilidad

Sainz se mareó al inicio de la carrera al tratar de mantenter las ruedas calientes mientras esperaba la salida del coche de seguridad

D. S. DE CASTRO

Lunes, 12 de octubre 2015, 00:23

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Fernando Alonso compareció ante los medios antes que ante los comisarios. Ni siquiera sabía que le iban a sancionar con cinco dolorosos segundos que le privaron de sumar el último punto, poco bálsamo para una campaña que escuece y mucho en el seno de McLaren. No respetar los límites de la curva 16 del trazado ruso le costó una sanción que no esperaba, obviamente, pero las sensaciones generales del fin de semana son razonablemente positivas.

Antes de ser castigado, el asturiano se mostró contento por cómo le fue el fin de semana, más que por el rendimiento por la fiabilidad mostrada. «Acabar entre los diez primeros con ambos monoplazas, en un circuito en el que no esperábamos que nos fuera bien, fue una agradable sorpresa. Ha sido una pena perder luego una posición (por la sanción de cinco segundos recibida por recortar en una curva)», afirmaba. «De hecho, el coche fue muy bien en la carrera; creo que pudimos cuidar los neumáticos algo mejor que los coches de alrededor y ha sido una tarde en la que cualquier cosa, por pequeña que fuera, ayudaba», dijo.

«Ahora esperamos tener un mayor rendimiento en la próxima carrera, en Estados Unidos. Será complicado, y tendremos que seguir siendo realistas, pero estoy definitivamente contento con el resultado de hoy», confirmó al respecto.

Otra vez la mecánica

Por otra parte, Carlos Sainz rozó la proeza de su vida. El piloto madrileño salió vigésimo, después de pasar el día anterior en el hospital por uno de los accidentes más fuertes que ha sufrido, y llegó a remontar hasta la séptima plaza. Sin embargo, la mecánica le volvió a dejar fuera, y ya van seis carreras este año.

Pese a que la carrera fue muy buena por su parte, al acabar, se sentía decepcionado. «Una lástima. Después de todo el drama de ayer y séptimo con opciones de acabar sexto, detrás de Ricciardo y tener que retirarse después de hacer la mejor carrera del campeonato, pues es una pena», se lamentaba el de Toro Rosso. La carrera no fue fácil para él y, como prueba, una anécdota: se mareó en las primeras vueltas. No por efectos secundarios del accidente, sino porque dieron muchas vueltas detrás del coche de seguridad «haciendo eses para mantener la temperatura de las ruedas».

Además, Roberto Merhi volvió al Manor por una carrera y no le pudo salir mejor. El castellonense superó a su compañero Will Stevens en las primeras vueltas y, pese a que no pudo hacer mucho más, los accidentes por delante le llevaron hasta la 13 plaza.

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