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AIDA COLLADO
Domingo, 2 de agosto 2015, 00:24
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Parece que FTI Consulting, la consultora estadounidense a la que Tenneco le ha encargado la búsqueda de un comprador para su planta de Gijón durante este verano, está haciendo los deberes. Por el momento, los responsables de dos grandes empresas han visitado ya las instalaciones de la multinacional en Asturias. Al menos una de estas compañías, la alemana Quantum Capital Partners, continúa a día de hoy -cuando ya ha comenzado el plazo de ofertas vinculantes- interesada en la factoría gijonesa. Un interés que debe de ser profundo, por la importancia de la delegación que envió a revisar la factoría. Este mes, se pasearon por Tenneco en Gijón nada más y nada menos que el director ejecutivo de este grupo de inversión germano, Steffen Görig, y el responsable del grupo en la Península Ibérica, Yaukuma Armbruster.
Todo apunta a que esta empresa es una de las que más oportunidades tiene para hacerse finalmente con la fábrica asturiana, aunque hay más interesados que, en este momento del proceso de compra y una vez descartados algunos proyectos industriales que no eran adecuados para las instalaciones de Gijón, recibirán una información más detallada de la situación de la empresa, en cuanto a rentabilidad, datos de eficiencia y productividad. Queda mucho partido. Ya se han borrado del proceso algunos fondos de inversión y otros empresarios asturianos y del resto de España, pero todavía podrán presentarse ofertas firmes de compra hasta finales de septiembre o principios de octubre, por lo que el futuro de la planta de Tenneco es aún una incógnita.
Un misterio que preocupa sobremanera a su plantilla, que ya ha puesto al tanto del inicio del proceso de compra a la Unión Europea, con el anhelo de que las instituciones de dentro y fuera de España se mantengan vigilantes.
Los trabajadores temen salir del paraguas de Tenneco para engrosar las cuentas de un fondo de inversión cuya estrategia de actuación pasa por invertir en empresas segregadas, explotar su propiedad unos cuantos años y, una vez se ha desarrollado su potencial y, por lo tanto, elevado su precio de venta, pasarla a otras manos. Sin embargo, y aunque hubiese que abordar otro cambio de propietarios en el futuro, algunos señalan que Quantum Capital Partners añadiría valor a la planta y trabajaría por su crecimiento, dejándola en una mejor situación. De momento, son todo castillos en el aire. A día de hoy, la empresa no está vendida.
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