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Los dos depósitos de la regasificadora de El Musel, vistos desde el faro de la Campa Torres.
Enagás negocia con grandes comercializadores para dar actividad a la regasificadora de El Musel

Enagás negocia con grandes comercializadores para dar actividad a la regasificadora de El Musel

La compañía afirma que la instalación «cumple con toda la reglamentación actual en vigor» para su regularización legal

O. VILLA

Domingo, 12 de febrero 2017, 08:57

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Hay algunos asuntos en los que el Gobierno central y el del Principado están de acuerdo. Uno de ellos, y de los principales en lo relativo a su montante económico es la necesidad de «buscar vías» para la regularización de la regasificadora de El Musel, según expresaron el pasado 31 de enero el ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, y el consejero de Empleo, Industria y Turismo del Principado, Francisco Blanco, tras mantener una reunión en Madrid.

Se trata de regularizar una instalación contra la que pende una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, confirmada en febrero de 2016 por el Tribunal Supremo, pero que hoy en día cumple con la actual normativa. Una nueva licencia u «otras fórmulas», como «un acuerdo del Consejo de Ministros, como se hizo con la planta gallega de Mugardos», según explicó Nadal tras la reunión con Blanco, permitirían a la empresa operadora, Enagás, poner por fin en actividad a la regasificadora de El Musel, hibernada desde octubre de 2012, cuando concluyó su construcción.

Enagás confía en que la regularización será factible y que no habrá que demoler la instalación, en la que invirtió más de 380 millones de euros. De hecho, subraya que «el proyecto cumple con toda la reglamentación actual en vigor y se encuentra precomisionada y en mantenimiento para garantizar un coste y plazo mínimos de puesta en marcha». Por eso prepara ya ese escenario, el de la activación de la regasificadora. Visto que, por el momento, su utilización dentro de la red gasística española no es necesaria, se piensa en otras opciones para darle actividad. La empresa Enagás negocia ya con grandes comercializadores mundiales de gas natural licuado (GNL) para ofrecer la utilización de la regasificadora como almacén gasístico y cabeza de puente logística.

16,5 millones de toneladas

Una de las grandes empresas con la que Enagás está negociando es la rusa Novatek, propietaria al 50,1% de de la gran planta productora de gas natural licuado de Yamal LNG, situada en Sabetta, al noroeste de la península de Yamal, que se está acabando de construir y cuya entrada en funcionamiento está prevista para finales de este año. También forman parte del proyecto las empresas Total (20%) y CNPC (20%), y el fondo de inversión Silk (9,9%).Yamal LNG Es un centro de producción de gas licuado que se suministrará del campo de gas Tambeyskoye Sur, muy cercano y con una inmensa capacidad de producción, tras una inversión que inicialmente se calculaba en 27.000 millones de dólares (25.371 millones de euros).

Este año se abrirá la primera de las tres cadenas de producción previstas en Yamal LNG, que sumarán 16,5 millones de toneladas de GNL al año. La capacidad total se alcanzará en 2021. Para entonces, Novatek tendrá que tener garantizada una red logística que, en principio, no pasa por distribuir el gas por gasoductos, sino a través de grandes buques de GNL que utilizarán para ello el puerto de Sabetta, en el que el Gobierno ruso ha invertido alrededor de 47.000 millones de rublos (unos 760 millones de euros) para mantenerlo abierto todo el año, pese a estar en el Círculo Polar Ártico.

El principal mercado al que está orientado inicialmente el proyecto es el chino, para el que la empresa coreana Daewoo está construyendo en sus astilleros 16 buques gaseros, que serán operados por Sovcomflot.

Pero la capacidad de producción de los campos de gas de la península de Yamal es tan grande y Yamal LNG está siendo dimensionada de tal forma que está buscando otros mercados, y ahí es donde entra la regasificadora de El Musel. Enagás prevé que en el mercado haya exceso de GNL a corto y medio plazo, por lo que la necesidad de almacenamiento a medio y largo plazo sitúa los tanques gijoneses en posición de ventaja. Según la empresa, «El Musel podría convertirse en una base logística de referencia en su entorno», que en el caso del gas ruso no es el español, sino el atlántico.

Enagás también está reconocida por la UE como líder del proyecto Core LNGas Hive, para el desarrollo del GNL como combustible en el transporte marítimo (bunkering). La empresa apunta que el de Gijón es un puerto «Core que necesita infraestructuras de bunkering para asegurar su competitividad» y entrar en ese mercado. Es más, Enagás recuerda que en la ampliación de El Musel hay «espacio adicional para tres tanques más», aparte de los dos ya existentes. La regasificadora de El Musel es definida por Enagás como «la terminal más avanzada», y recuerda que «es compatible con el 100% de la flota mundial de buques metaneros».

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