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N. A. E.
Jueves, 9 de junio 2016, 05:01
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No soplan buenos tiempos para el sector lácteo, aquejado por la caída del consumo interno, el veto ruso que desde hace dos años ha frenado las importaciones o la desaceleración de las economías emergentes, un cóctel que ha provocado un desajuste entre la oferta y la demanda y el desplome de los precios. En este escenario, la asamblea de socios compromisarios de Central Lechera Asturiana, Sociedad Agraria de Transformación (SAT), aprobó ayer con 56 votos a favor, que representan a 716 socios, las cuentas del grupo correspondientes a 2015. Este apoyo supone un 57,23% de la asamblea y es superior al del año pasado, en el que solo se logró el 51,35%. Mientras, hubo 38 votos en contra, el 38,6% -483 socios- y cuatro abstenciones, un 4,16% -52 socios-. A la asamblea acudieron 98 del total de 109 compromisarios.
La cifra de negocio durante el ejercicio anterior fue, según informó el grupo, de 700 millones de euros, con unos resultados de explotación de 12,94 millones y unos beneficios de 9,2 millones, algo inferiores a los de 2014, que se acercaron a los diez millones, pero en una línea similar, muy marcada por la difícil conyuntura del sector.
Durante 2015, la sociedad Central Lechera Asturiana compró 390,5 millones de litros a sus socios. Sus cuentas anuales individuales arrojaron una cifra de negocio de 137,3 millones de euros y un resultado ajustado del ejercicio de más de 848.000 euros. El patrimonio neto de la SAT, a 31 de diciembre de 2015, ascendía a 44,5 millones de euros, más del doble que en 2014, cuando era de 20,2 millones.
Por otro lado, la asamblea también aprobó la propuesta de la junta rectora de la SAT de proceder al reparto de los beneficios del ejercicio. 42.325 millones de destinarán a obra social; 242.858, a intereses, y 381.632, a participación en ganancias, mientras que 24.146 pasarán a formar parte del capítulo de otras reservas. Asimismo, la mayoría de los compromisarios se mostraron favorables al nuevo valor liquidativo de las participaciones de los socios, que se fijó en 30,34 euros por euro de valor nominal, teniendo en cuenta el valor razonable según el balance de 2015. La sociedad cerró el año pasado con 7.474 socios, de los que 1.379 eran activos y 6.095 pasivos.
A finales del pasado mes de mayo, la junta general de accionistas de la Corporación Alimentaria Peñasanta, S. A. (CAPSA) aprobó también las cuentas correspondientes al ejercicio de 2015, en el que la compañía presentó unos beneficios netos consolidados después de impuestos de 10,5 millones de euros, un 17% más que en 2014. CAPSA agrupa a Central Lechera Asturiana, ATO, Larsa e Innova. Mientras que el consumo general de productos lácteos en el mercado español se ha reducido alrededor del 2% y las exportaciones también han bajado, Central Lechera Asturiana creció un 7% respecto a 2014, tanto en gran consumo como en hostelería. En las ventas minoristas a familias, el crecimiento fue del 7% en leche líquida y del 27% en vegetales.
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