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NOELIA A. ERAUSQUIN
Sábado, 25 de febrero 2017, 04:24
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Duro Felguera publicó ayer sus resultados de 2016, pero también anuncios de relevancia, como el estudio de un plan «que permita una reducción significativa de costes» o su decisión de nombrar un consejero delegado, cargo que hasta ahora compaginaba junto a la presidencia Ángel Antonio del Valle, yerno del máximo accionista, Gonzalo Álvarez Arrojo. La empresa, que perdió el año pasado 18,2 millones, justifica esta medida en su interés por «reforzar el equipo gestor», aunque, según ha podido saber este periódico, también se trata de una de las exigencias de la banca para reestructurar la deuda del grupo, que debe a distintas entidades financieras unos 225 millones de euros.
Duro Felguera atribuye el incremento interanual de la deuda neta a la ejecución de los avales del proyecto de Roy Hill (Australia) por importe de 88 millones de euros y que está en proceso de arbitraje y los sobrecostes asociados a los contratos de Vuelta de Obligado (Argentina) y Carrington (Reino Unido), también en arbitraje. No obstante, durante el cuarto trimestre, el grupo redujo la deuda en 28 millones debido al cobro de más de nueve de la central de Termocentro (Venezuela) y a anticipos de proyectos en curso. Además, desde que comenzó el año, la compañía ha recibido el pago de 15 millones de euros por el proyecto venezolano, aunque el saldo pendiente aún asciende a 78 millones de euros.
La deuda del grupo, derivada básicamente de los cuatro proyectos citados, continúa siendo uno de sus principales problemas. La compañía mantiene negociaciones con Bankia, BBVA, Caixabank, Popular, Sabadell y Santander sobre vencimientos de deuda y garantías comerciales. Además, como parte de este proceso, entre noviembre de 2016 y febrero de 2017, PwC sometió a Duro a una revisión independiente para validar su plan de negocio.
Con el objetivo de hacer caja, la empresa ha puesto a la venta activos no productivos, entre ellos el taller de Barros o su sede central de Madrid y, durante 2016, logró varios ingresos adicionales al completar la venta de Petróleos Asturianos por un importe de 13,8 millones de euros y se obtuvo una indemnización de cuatro millones de euros por la participación en Núcleo.
Resultados negativos
A pesar de que Duro Felguera cerró el tercer trimestre con un beneficio de 1,6 millones de euros, la compañía no pudo mantener los números verdes al finalizar 2016. No obstante, a pesar de perder 18,2 millones, esta cifra es significativamente inferior al resultado negativo de 2015, que arrojó unos números rojos de 68,8 millones. De hecho, la compañía subraya la consecución de un ebitda -resultado antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones- positivo de 8,6 millones de euros, frente a las pérdidas operativas brutas de 96 millones registradas el año anterior.
Por otro lado, las ventas fueron de 709 millones de euros, un 8% inferiores a las de 2015, que Duro Felguera atribuye a la demora en el inicio de algunos proyectos de una cartera que alcanza una cifra de 2.201 millones de euros. Por su parte, la contratación durante el ejercicio fue de 625 millones.
En lo que se refiere al resultado financiero neto, fue de 19,5 millones de euros negativos, frente a 10,8 positivos el año anterior, principalmente debido a menores ingresos financieros, al elevado endeudamiento local en Argentina y a las diferencias negativas de cambio por importe de 1,5 millones, que en 2015 fueron positivas por 11,4 millones.
A pesar de las pérdidas, el mercado no acogió estos resultados con una gran caída. Las acciones bajaron un 1,6%, pero aún mantiene una progresión positiva en lo que va de 2017.
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