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Lunes, 1 de septiembre 2014, 13:34
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Mes de julio. Calor y un autobús que está atestado de pasajeros. La línea 10, la que hace el recorrido entre Pumarín-Somió-Hospital de Cabueñes, fue protagonista de un desagradable incidente cuando un hombre intentó acceder a la parte posterior del bus, ya de por sí lleno de ciudadanos. Los empujones y la sensación de ahogo se hicieron patentes entre los pasajeros, que formaban una especie de tapón humano que impedía tener acceso a la parte trasera del bus. El malestar de los allí presentes se tornó en graves insultos hacia el hombre, que fue obligado a apearse del vehículo.
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