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'El Pegollín' del barrio alto

El patrón de los fogones de 'El Veleru' está anclado a Cimadevilla

JANEL CUESTA

Lunes, 24 de noviembre 2014, 00:32

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Si hay algo que está de moda en los últimos años es, sin duda alguna, el tema de la gastronomía, algo tan evidente que parece toda una fiebre con omnipresencia en los medios de comunicación. Hasta tal punto de que algunos profesionales ya se han convertido en auténticas estrellas de la televisión, y no digamos la consiguiente relevancia de sus respectivos establecimientos hosteleros. Es notorio que aquí en Gijón no vamos a la zaga en este asunto y, por no citar a los muchos que hacen historia, tenemos aquí un especial recuerdo para 'el gallu' del barrio del Carmen, tristemente fallecido, Víctor Bango 'Victorón'. Sirve como preámbulo a nuestro personaje de hoy, quien, pese a sus envidiables 45 abriles (bueno, mejor dicho, 'mayos', puesto que nació un 18 de dicho mes en el año 1969), ha logrado hacerse un hueco en tan competitiva actividad, puesto que decir en Gijón (y en Cimadevilla muy especialmente) 'El Pegollín' ya es todo un símbolo de competencia hostelera y no necesita más presentación.

Juan Carlos Iglesias Rodríguez 'El Pegollín' nació en Gijón, cuando sus padres María Rodríguez Quintana y Amador Iglesias Freije, este último albañil de profesión, vivían en el barrio de El Coto. Eran naturales de Taramundi y Juan Carlos sería el mayor de cuatro hermanos. Su primera y única escuela fue el colegio Ramón de Campoamor, al que acudía por clara imposición familiar y, con sólo 14 años, se las arregló para comenzar a trabajar fregando platos en 'La Zamorana'.

De allí pasó sucesivamente por Casa Tino 'El Roxu' y Casa Justo. Y, como de tonto no tenía ni un pelo, cuando fue llamado a filas para cumplir el Servicio Militar en Ceuta, ya se las arregló para enrolarse de camarero en el bar de los oficiales de la más alta graduación que en la 'mili' se conocía como 'El Imperio', y, para no desentonar, Juan Carlos 'El Pegollín' llegó a vivir como un auténtico 'general' sin galones, porque esos para él eran lo de menos.

200 kilos de centollo gratis

Al regresar a Gijón, trabajó un año con su padre en la construcción y, como aquello no era lo suyo, con la ayuda de su progenitor abrió su propio establecimiento en la calle Campo Sagrado, con el nombre de 'El Pegollín' basándose en un pegollu próximo al bar, que no tardó en hacerse famoso.

A los dos años adquirió el bar 'El Alleranu' en la calle Cienfuegos, donde armó una auténtica revolución. Ya de entrada popularizó el eslogan 'Algo va a suceder en Gijón' y lo que sucedió, entre otras, cosas fue que creó el plato de arroz con bugre y caviar de oricio, que fue elogiado y premiado dentro del ramo, y hasta Francisco Carantoña le dio 'cancha' en sus insuperables artículos.

En cierta ocasión se colapsó la calle Cienfuegos porque a 'El Pegollín' un buen día se le ocurrió regalar 200 kilos de centollos a todo el que visitase 'El Alleranu'. Se corrió la voz y ya se pueden imaginar la que se armó y lo poco que duraron.

Tras un breve paso por Santurio, donde se instaló con un merendero, en el año 2000 comenzó el nuevo milenio en Cimadevilla, en la calle del Rosario, esquina a Campo Sagrado, en una antañona casa rehabilitada por Kike Pajares, donde estuvo la famosa tienda para todo de 'Ojos Cariñosos' y también vivían las familias de Ángel 'El Playu' y 'Los Quirosos'. El nuevo establecimiento se llamó 'El Veleru', a pocos metros del no menos prestigioso 'Casa Zabala' con Amparín y su hijo Guillermo. Y Juan Carlos 'El Pegollín' pronto se dejó notar colocando la primera terraza escalonada del Barrio Alto y sentando cátedra con los mejores pescados, pero como sus aspiraciones empresariales no tenían fronteras, creó Revestimientos Jumper con su amigo Pedro Félix Cubino y con más de cien trabajadores. Aunque Juan Carlos no sabía poner ni un ladrillo, llegaron a realizar grandes obras, incluso con Hugo Chávez, el fallecido presidente de Venezuela, adonde viajaba todos los meses. Pero 'los pufos' de hasta un millón de euros y la maldita crisis le llevaron a la ruina, refugiándose con su madre en el valle de Turón, donde se ganó el aprecio de todos los vecinos de Ceposa, La Cabana y La Carcarosa.

Ahora, Juan Carlos 'El Pegollín' renace como el Ave Fénix 'navegando' de nuevo en 'El Veleru' junto con Javier Santaeugenia, hijo de 'Sansón', mítico jugador del Cimadevilla Club de Fútbol, y el cocinero Fernando Vihuela, con experiencia en Inglaterra, Cataluña o Canarias, y otros ocho empleados. Porque, sin duda alguna, «El Barrio Alto de Gijón es lo mejor», y va a ser mucho mejor aún con la presencia de este 'Pegollín' que, hace años, en sus mejores momentos, llegó a cocinar y financiar en repetidas ocasiones la comida para 200 personas en la Cocina Económica, pero también aventó un plato contra la pared y expulsó de 'El Veleru' a unos catalanes a los que, además de criticar el color del pescado les parecía un precio excesivo. «¡Venga, coño! ¡Si no saben lo que ye bueno vayan pa' Cataluña...!», les dijo esti 'Pegollín' que, en la mitad de su agitada vida, ha dado y va a dar mucho que hablar junto con sus colegas Javier y Fernando. Tres mosqueteros que no tienen fronteras y que, desde este 'Veleru', aunque varado en Cimadevilla, son capaces de conquistar el mundo.

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