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Carmen Moriyón, José Luis Carmona, Guillermo Martínez, Mónica Oviedo, Mario García y Carmen Sanjurjo, durante la entrega del premio del Cermi a la Casa Malva.
«El maltrato en discapacidad es atroz»

«El maltrato en discapacidad es atroz»

35 de las personas protegidas por la Casa Malva carecían de autonomía personal

CHELO TUYA

Miércoles, 10 de diciembre 2014, 00:17

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El maltrato es «una lacra que nos llena de indignación y de impotencia», pero, en el caso de las mujeres con discapacidad, «es atroz». Así lo aseguró ayer la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, durante el acto de entrega del premio Cermi 2014. El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad eligió, entre más de cien proyectos, a la Casa Malva para su galardón 2014.

Este premio, «el máximo que otorga el colectivo de la discapacidad», explicó el vicepresidente del Cermi a escala nacional, el asturiano Mario García, llega al buque insignia de la Red Asturiana de Acogida, que también es el primer centro integral del país en atención a víctimas de violencia machista.

Desde su apertura, en 2007, la Casa Malva, levantada en Montevil con fondos del Principado en una parcela municipal, protegió a 35 víctimas con algún tipo de discapacidad. La mayoría, 29, fueron mujeres, mientras que el resto eran menores con discapacidad víctimas directas o hijos de maltratadas.

Una cifra muy inferior al total de mujeres y menores atendidos en la red, que llegó a 3.333 en los últimos años, lo que llevó al vicepresidente del Cermi a hablar de «una doble e, incluso triple, marginación de la mujer discapacitada víctima de violencia de género: por mujer, por discapacitada y, en un porcentaje muy alto, por pobre». Una situación en la que viven muchas del 2,4 millones de españolas «que tienen alguna discapacidad», según el último censo.

De esa doble marginación también habló la alcaldesa de Gijón, ya que considera que «la mujer con discapacidad suma muchos de los problemas que tienen las víctimas de malos tratos: la dependencia económica del agresor». Según un estudio del Ministerio de Sanidad de 2011 al que hizo referencia, «hay prejuicios hacia la discapacidad. El maltrato en entre esas personas llega, en muchas ocasiones, desde el ámbito del cuidador. Es un fenómeno que no se quiere ver, que se niega y que atemoriza, por terrible».

«Cifras escalofriantes»

Una posición que respaldaron, también, la directora del Instituto Asturiano de la Mujer, Carmen Sanjurjo, y el consejero de Presidencia, Guillermo Martínez, encargado de presidir el acto de entrega del premio Cermi 2014 a la Casa Malva.

Martínez, como ya apuntó el pasado 25 de noviembre, Día Internacional contra la Violencia a la Mujer, recordó que «todavía tenemos muchos desafíos», porque las tres últimas mujeres asesinadas por sus exparejas elevan a 50 las víctimas mortales en lo que va de año. «Son unas cifras escalofriantes, se miren por donde se miren, por lo que mientras haya víctimas de violencia de género, en la proporción que sea, serán necesarios proyectos como este de la Casa Malva».

El galardón fue recogido por José Luis Carmona, presidente de la Asamblea Local de Cruz Roja, ya que ese organismo es el encargado de gestionar la Red de Casas de Acogida del Principado. Carmona destacó el gran trabajo previo a la construcción de la Casa Malva «con los colectivos de discapacidad para que sea un centro adaptado» y aseguró que Cruz Roja «seguirá trabajando para erradicar esta lacra social».

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